España eleva un 8% las compras a Marruecos en plena ola de protestas de los agricultores

Las importaciones de Marruecos han comenzado el año 2024 en máximos. Las cifras publicadas esta semana por la Secretaría de Estado de Comercio y cribadas por THE OBJECTIVE indican que las compras de España a Rabat se dispararon hasta los 784 millones de euros en enero -un 8,4% más-, convirtiendo a este país en nuestro primer proveedor después de la Unión Europea, China y Estados Unidos.

La mejora con Marruecos se produce en un contexto de caída del porcentaje acumulado de las importaciones de España con el resto de sus socios comerciales (una bajada global del 2,9%) y el retroceso de las compras a históricos como China (-20,9%), Argentina (-18,4%), Bélgica (-12,3%) Reino Unido (-5,1%), Estados Unidos (-4%) y Francia (-0,8%).

Este aumento coincide además con un gran crecimiento de las importaciones de alimentos frescos: en enero, las compras de frutas, hortalizas y legumbres en el extranjero subieron un 18% hasta los 699 millones de euros; los aceites y grasas un 16% hasta los 463 millones; y el azúcar, el café y el cacao un 12%, para llegar a los 446 millones. Las compras de productos cárnicos también se dispararon un 6,8% hasta los 266 millones.

Quejas de los agricultores

La Secretaría de Estado de Comercio no da el detalle del destino del tipo de productos adquiridos en el extranjero, pero los agricultores españoles llevan semanas denunciando el aumento de la importación de frutas y hortalizas desde Marruecos, una situación que –indican– afecta su producción y les presiona a bajar los precios. Del mismo modo, denuncian que los controles que se realizan a los alimentos que llegan desde Rabat no tienen los mismos que se hacen en la Unión Europea, lo que genera que este país pueda ofrecer precios por debajo del coste de producir en España.

Los datos que se han conocido esta semana –y que corresponden al mes de enero– se producen en las mismas semanas que los agricultores españoles salieron a la calle a reclamar mejores condiciones y acciones a las autoridades españolas y europeas. Desde mediados de este mes, cientos de trabajadores del campo han comenzado a bloquear carreteras y a realizar tractoradas por las principales ciudades del país.

Los agricultores en toda la Unión Europea exigen que todas las importaciones tengan los mismos reglamentos y cumplimientos de normativas fitosanitarias y de bienestar animal. También solicitan que se establezcan aranceles a la entrada de productos extracomunitarios, por lo que piden la paralización de diferentes acuerdos, como el que se ha firmado entre la Unión Europea con Marruecos o las negociaciones de acuerdos con Mercosur, Chile, Kenia, México, India y Australia.

Compras a Marruecos

Los trabajadores del campo en España exigen al Gobierno aumentar los controles en la frontera con Marruecos para garantizar que los productos agrícolas importados cumplan con las normativas internas de la Unión Europea. En esta línea, la Unió Llauradora i Ramadera, organización agraria de la Comunidad Valenciana, denunció esta semana la detección de hepatitis A en un envío de fresas procedentes de Marruecos. Es la segunda alerta por estos mismos motivos que se activa en menos de diez días.

Los datos de comercio exterior publicados significan además un aumento tanto de las importaciones a Marruecos como de las compras de alimentos frescos en el extranjero, por encima de los datos ya registrados en 2023, acentuando estos dos fenómenos: España cada vez compra más productos a Rabat, al mismo tiempo que aumenta exponencialmente la adquisición de frutas y hortalizas en el extranjero.

En el año 2023, las exportaciones de España a Marruecos llegaron a los 12.146 millones de euros, un alza del 3,4%, mientras que la caída de los envíos a otros países supuso que el peso de Rabat en el mix exportador creciera hasta el 3,2% de la tarta total. En el caso de las importaciones, llegaron a los 9.032 millones (un 3,9% más), por lo que su peso en el total pasó de 1,9% al 2,1% en solo un año.

Datos de 2023

Este mismo año, la importación de frutas, hortalizas y legumbres se disparó hasta los 8.218 millones de euros, un crecimiento del 12,1% respecto de 2022, que ya marcó un récord histórico para el sector. Hasta 2021, la media del crecimiento de las importaciones de estos productos se movía entre el 2% y el 2,4% para dispararse un 20,5% en 2022. A finales de 2021, estas compras tenían un valor anual de 7.333 millones y al final del año pasado ya era de 8.218, casi 1.000 millones de crecimiento en 12 meses.

Los cifras de la Secretaría de Estado de Comercio indican que las importaciones de frutas y verduras desde Marruecos llegaron a los 800 millones de euros en 2023, lo que les convirtió en el mayor proveedor de África. Los productos que España compra mayoritariamente a este país son fresas, judías, arándanos, pimientos, aguacates y sandías, frutas y hortalizas.