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Transporte

El Gobierno concede 25 millones de fondos UE para fabricar coches chinos en España

La UE ha criticado la ‘joint venture’ entre una empresa española y una china para producir vehículos en Barcelona

El Gobierno concede 25 millones de fondos UE para fabricar coches chinos en España

Momento de la firma del acuerdo con el ceo de Ebro, Pedro Calef, y el vicepresidente internacional de Chery, Guibing Zhang, junto al presidente Pedro Sánchez, el entonces presidente Pere Aragonès y el ministro Jordi Hereu. | Europa Press

El Gobierno español concedió 25,2 millones de euros de fondos europeos Next Generation a la empresa Ebro SUV SL, compañía participada por Chery y a través de la cual el fabricante chino monta coches de origen asiático en la exfábrica de Nissan de Barcelona. Según ha podido confirmar THE OBJECTIVE en el portal de subvenciones, las ayudas se entregaron el pasado mes de septiembre en el marco del Perte del Vehículo Eléctrico y Conectado que reparte el Ministerio de Industria.

Se trata de un importe de 20,9 millones de euros en forma de préstamo y otros 4,3 millones de subvenciones y entrega dineraria sin contraprestación, es decir, que no deben ser devueltas. Y corresponden a la misma convocatoria de concesión de ayudas a proyectos para el impulso a la cadena de valor del vehículo eléctrico y conectado dentro del Perte VEC, en el marco del Plan de Recuperación y Resiliencia atribuidos a los Presupuestos del año 2024.

Estas ayudas se han repartido en toda la industria automovilística española. En total, 353 millones solo para esta convocatoria, aunque con la particularidad de que es primera vez que se conceden ayudas de fondos europeos de manera indirecta a una empresa china. Y justo en un momento en el que la relación de Madrid y Pekín está en el punto de mira de la Unión Europea y de Estados Unidos por los contratos de comunicaciones críticas y estratégicas de la administración española con Huawei.

Fábrica de Barcelona

Su industria automotriz también está bajo sospecha, ya que la UE les acusa de competencia desleal y de tener precios bajos gracias a ayudas de Estado. La Comisión Europea incluso considera que la puesta en marcha de esta fábrica en Barcelona podría estar sorteando los aranceles impuestos a los vehículos del gigante asiático en el continente. Y por ello, en Bruselas tampoco es bien visto dar ayudas de fondos Next Generation a una empresa que no solo es china, sino que también es parte de una industria que —a su juicio— cuestiona toda la estrategia de automoción europea. Por si fuera poco, Chery suele utilizar tecnología Huawei para sus coches.

En abril de 2024, Chery (filial de la todopoderosa china Omoda) firmó un acuerdo marco con Ebro para que el gigante asiático utilizara las antiguas fábricas de Nissan en la Zona Franca de Barcelona. Una joint venture de comercialización de los vehículos de la compañía en Europa y una segunda alianza para la producción, en especial de eléctricos. El proyecto se constituyó como el primer desembarco de un fabricante de Pekín de coches dentro de Europa, con una inversión de 400 millones, entre capital público y privado, y que pretende fabricar 150.000 vehículos en el 2029 y emplear a 1.250 trabajadores.

Esta alianza —apadrinada por Pedro Sánchez en la presentación del acuerdo en Barcelona— se producía en medio de la guerra de la Unión Europea con Pekín por la irrupción de los coches chinos que quitan cuota de mercado a los fabricantes europeos a pasos agigantados, en especial en el mercado eléctrico. La UE elaboró diferentes informes en los que señaló específicamente a Chery como el mejor ejemplo de una empresa subvencionada artificialmente por el Gobierno chino para «colonizar» los mercados europeos, en este caso el de vehículos particulares.

Críticas de Bruselas

«El Estado chino sigue ejerciendo una influencia decisiva en la asignación de los recursos y en sus precios» lo que genera «distorsiones comerciales» a través de subvenciones, trato fiscal y tributario a medida, políticas laborales ad hoc y modificación de las reglas del juego comercial para beneficiar a sus compañías públicas, decía la UE en un informe de abril de 2024. Sería la base de la posterior imposición de aranceles de hasta el 35% a los coches chinos en octubre de 2024.

La fábrica de Chery en Barcelona es señalada en la Comisión Europea como un ejemplo de cómo las empresas chinas pueden esquivar los aranceles de la UE. En septiembre de este año, el comisario de Prosperidad y Estrategia Industrial, Stéphane Séjourné, criticó la política del Ejecutivo de permitir a las empresas chinas su implantación en España. «El modelo que vemos en España a menudo no es un buen modelo, no da crecimiento a nuestras empresas en términos de producción», subrayó en un encuentro con periodistas españoles.

Este diario también advirtió que las alarmas habían saltado en Bruselas cuando el ministro de Industria, Jordi Hereu, invitó a la china Chery a presentarse a la convocatoria del Perte VEC III en junio del año pasado, tanto en la línea de baterías como en la de cadena de valor. Todo en el marco de una reunión con el vicepresidente de la compañía para abordar los proyectos de inversión que el fabricante de vehículos eléctricos tiene previstos para España. Finalmente, Ebro terminó presentándose y obtuvo los citados 25 millones.

Coches chinos

Actualmente, y pese al interés de Chery de producir coches directamente en España, solo se han limitado a montar los vehículos con piezas y tecnología que se trae enteramente desde China. Efectivamente, generan empleo, pero de momento de escaso valor agregado y ajenos a cualquier desarrollo de I+D en España. Ebro además se ha convertido en una marca a través de la cual vender en el mercado español coches ideados y piezas producidas 100% en el gigante asiático. Incluso los modelos que salen de la fábrica se inspiran en modelos históricos de los asiáticos.

Por otro lado, desde que firmaron su alianza el año pasado, los asiáticos han tomado el control de la gestión de Ebro. EV Motors, cuyos socios fundadores son Rafael Ruiz, Pedro Calef y Daniel Asensio, adquirió en 2021 la marca Ebro; en abril de 2024 firmaron el pacto con la empresa china; en enero de este año, se incorporaron tres directivos de Chery al consejo de Ebro SUV (la filial de las ayudas europeas), uno de ellos como vicepresidente del organismo; y el pasado 28 de abril aprobó en su junta general de accionistas pasar a llamarse Ebro EV Motors, la matriz de todo el grupo.

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