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El Supremo rebaja la condena de Urdangarin a cinco años y diez meses de prisión

El Tribunal Supremo ha condenado a Iñaki Urdangarin a una pena de cinco años y diez meses de cárcel por prevaricación, malversación y tráfico de influencias, cinco meses menos que la que le impuso la Audiencia de Palma de Mallorca el 17 de febrero de 2017. Urdangarin, marido de la infanta Cristina, se ha convertido así en el primer pariente de la Familia Real en tener una sentencia firme de prisión.

El Supremo rebaja la condena de Urdangarin a cinco años y diez meses de prisión

Reuters

El Tribunal Supremo ha rebajado la pena impuesta a Iñaki Urdangarin por la Audiencia de Palma de Mallorca a una pena de cinco años y diez meses de cárcel por prevaricación, malversación y fraude a la Administración, dos delitos fiscales y tráfico de influencias. La sentencia de la Audiencia de Palma de Mallorca del 17 de febrero de 2017 condenaba a Urdangarin a seis años y tres meses de prisión. El marido de la infanta Cristina se ha convertido así en el primer pariente de la Familia Real en tener una sentencia firme de prisión.

Además, el Tribunal Supremo ha rebajado la cuantía que la Audiencia de Palma de Mallorca impuso pagar a la infanta Cristina como responsable civil a título lucrativo de 265.088 euros a 136.950 euros. El alto tribunal entiende que no puede responder de esa manera de los delitos fiscales de su marido, pero sí de los de malversación y fraude, los otros delitos por los que fue condenada a pagar en concepto de responsabilidad civil y que el Tribunal Supremo ha decidido mantener.

Esta misma decisión de rebajar la responsabilidad civil se aplica a Ana María Tejeiro, mujer de Diego Torres, que presentó un recurso contra esta responsabilidad como partícipe a título lucrativo del delito fiscal de su marido. La estimación en parte de este recurso se aplica por extensión a Cristina de Borbón.

La Casa Real ha reafirmado este martes su «respeto absoluto a la independencia del poder judicial» tras conocer la decisión del Tribunal Supremo, que se ha hecho pública mientras Felipe VI presidía la reunión bienal del Capítulo de la Orden de San Hermenegildo en el Monasterio de San Lorenzo del Escorial y cuando la reina Letizia presidía la sesión de trabajo del patronato de la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción en la sede madrileña de Iberdrola.

Respecto a Diego Torres, el socio de Urdangarin en el Instituto Nóos, el Tribunal Supremo ha rebajado su condena de ocho años y medio a cinco años y ocho meses de prisión. Torres ha sido condenado por malversación, prevaricación y fraude a la Administración, y ha sido absuelto de los delitos de tráfico de influencias, blanqueo y falsedad documental, al entender que no ha quedado probada su intervención. Además, se ha rebajado la multa que debe pagar de 1,72 millones de euros a 775.000 euros.

Al expresidente del Govern de Baleares Jaume Matas, el tribunal le ha mantenido la pena de tres años y ocho meses de cárcel, así como los siete años de inhabilitación impuestos por la sentencia anterior.

La Audiencia Provincial de Palma ha citado a Urdangarin, Torres y Matas este miércoles para entregarles el mandamiento de prisión.

La sentencia también ratifica los pronunciamientos de la Audiencia de Palma de Mallorca respecto al ex director general de Deportes de dicha comunidad José Luis Ballesteros, a quien mantiene una pena de 15 meses; al exgerente de la Fundación Illesport Gonzalo Bernal, con la misma pena; al exgerente del Instituto Balear de Turismo Juan Carlos Alía, condenado a un año; y otro año para el exasesor jurídico del mismo instituto, Miguel Ángel Bonet.  Además, ha confirmado las absoluciones que dictó la Audiencia de Palma de Mallorca.

El alto tribunal ha dictado la sentencia del caso Nóos tras elaborarla durante más de dos meses, desde que el 21 de marzo celebró la vista de los recursos de casación, en la que cinco magistrados revisaron los recursos presentados tras la sentencia de la Audiencia de Palma de Mallorca.

En su recurso ante el Tribunal Supremo, la Fiscalía pedía elevar la condena de Urdangarin a 10 años y la de Diego Torres a 12 años y medio. Por su parte, Urdangarin pedía la libre absolución alegando que actuó como un mediador sin conocimientos de Derecho administrativo.

El alto tribunal ha desestimado el recurso de la Fiscalía, argumentando que «no es posible revisar en contra del reo la valoración probatoria realizada por la Sala de Instancia». También ha rechazado el recurso de Manos Limpias, que quería que se levantara su condena a abonar las costas procesales causadas a la infanta Cristina tras la acusación que mantuvo contra ella y por la que fue absuelta por la Audiencia de Palma de Mallorca.

La entrada en prisión de Urdangarin que establece la condena, adoptada por unanimidad en el Tribunal Supremo, será decisión de la Audiencia balear, que puede decretar su ingreso en prisión directamente o convocar una vistilla para tomar una decisión. Urdangarin todavía puede pedir el indulto y presentar un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional, así como solicitar que la Audiencia de Palma de Mallorca deje en suspenso su ingreso en la cárcel hasta que el Constitucional decida si admite a trámite el recurso, algo que puede demorarse dos o tres meses.

Si se presenta voluntariamente con el mandamiento judicial que ordena su entrada en prisión, Urdangarin podrá ingresar en el centro penitenciario que él elija. Como establece la normativa, cualquier instalación penitenciaria tendría la obligación de acoger a Urdangarin si llega voluntariamente.

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