Florentino, ya te 'bale'

Florentino Pérez ha decidido darse un capricho y ha superado una vez más su propio récord, logrando pagar –gracias a los bancos a los que luego habrá que rescatar– el fichaje más caro de la historia del fútbol

A riesgo de que me manden a fregar por hablar de fútbol tal y como le hicieron a Ana Pastor por opinar sobre la suplencia de Casillas hace unos días, hoy me apetece hablar de un joven alto y guapo llamado Gareth Bale y de un club tan grande como el ego de su presidente y tan desmesurado como su deuda, el Real Madrid.

Míster Florentino Pérez ha decidido darse un capricho y ha superado una vez más su propio récord, logrando pagar –gracias a los bancos a los que luego habrá que rescatar– el fichaje más caro de la historia del fútbol y desembolsando más de 100 millones de euros por un jugador del que hace un año nadie en España sabía quién era. En realidad ellos, los del Madrid, dicen que han pagado 91, pero las malas lenguas, o sea las de verdad, aseguran que han sido 101. En fin, qué más da, 10 millones arriba, 10 millones abajo. El caso es que el este joven talento del balón viene además a jugar en una posición que ya estaba cubierta y percibirá 10 millones de euros netos por temporada. Una ganga. Un espejo para los jóvenes de este país, un ejemplo a seguir.

Esta patada en el hígado a una sociedad empobrecida, recortada, estafada y ninguneada como la nuestra es una muestra más del señorío de un equipo que tiene 600 millones de deuda. Sí, 600.

Y tras la gran gesta, 30.000 aficionados con sed de distracciones, de héroes o de ya no se sabe qué han asistido a una presentación que confirma quién es el que la tiene más larga en el futbol patrio. Y es que don Florentino es insuperable: en 2001 se gastó 75 millones en Zidane; en 2009 pagó 96 por Cristiano Ronaldo; y ahora, 101 en Gareth Bale. Siempre batiendo récords. Ya ostenta el podio al completo de los fichajes más caros de la historia, los más sonados, los más soñados. Qué grande Florentino, qué astronómico, qué faraónico. Un auténtico ganador.