La ONU en el váter
Pensaba que la ONU había alcanzado el sumum de la gilipollez. Pero no. Los prebostes burócratas se han superado con el Día del Retrete, que podrían complementar con la Semana de la Escobilla
Pensaba que la ONU había alcanzado el sumum de la gilipollez. Pero no. Los prebostes burócratas se han superado con el Día del Retrete, que podrían complementar con la Semana de la Escobilla
La ONU ha instaurado el 19 de noviembre como Día Internacional del Retrete. Palabrita del Niño Jesús. Con este sincero homenaje a la letrina, la ONU refuerza su principal misión, evacuar consultas, y su papel internacional, el papel higiénico.
Ingenuo de mí, pensaba que la ONU había alcanzado el sumum de la gilipollez con el Día Internacional para la Prevención del Medio Ambiente en Guerras y Conflictos Armados -6 de noviembre- que suena a proteger los árboles mientras la gente se dedica a partirse la crisma. Pero no. Los prebostes burócratas se han superado con el Día del Retrete, que podrían complementar con la Semana de la Escobilla.
Hay más días dedicados a un asunto que jornadas tiene el año. Esa es una de las cosas para las que sirve la ONU. Quizás la única. Sabido es que la ONU resuelve los conflictos internacionales con arreglo a tres principios: Si el conflicto es entre una superpotencia y un país pequeño, el país pequeño desaparece. Si el conflicto es entre dos países pequeños, desaparece el problema. Si el conflicto es entre dos superpotencias, lo que desaparece es la ONU.
Para entender mejor la ONU es preciso conocer su jerga. Donde condena quiere decir paripé. Resolución significa escrito inútil, voto es veto, y en ocasiones, detrás de una comisión de estudio hay en estudio una comisión. Conste mi respeto por quienes trabajan honradamente por las buenas causas. Pero mi confianza en este organismo es la misma que me inspira una boa constrictor en un ascensor. No hace tanto que la ONU designó al presidente de Ruanda, presunto genocida, coordinador del Grupo de Impulso de los Objetivos del Milenio. El repugnante sátrapa se llama Kagame. Así, no me extraña que le dediquen un día al váter.