Tres aplausos para Pedro
Aquí el arte no es arte. Y el cine no es cine ni es cultura. Aquí lo que importa es no hacer ruido, no pensar, no crear y sobre todo sobre todo no mojarse
Aquí el arte no es arte. Y el cine no es cine ni es cultura. Aquí lo que importa es no hacer ruido, no pensar, no crear y sobre todo sobre todo no mojarse
Recibió su premio de honor de la Academia de Cine Europeo y Pedro Almodóvar se acordó de su madre, de sus compañeros, de los directores que empiezan y de la sordera de un gobierno insensible -a la que yo añadiría ceguera, ignorancia y bastante mala leche-. El refrán de que nadie es profeta en su tierra está ya muy gastado, pero somos campeones en muchas cosas y una de ellas es en maltratar al cine propio. Palabrita de Montoro.
El domingo se celebraron los premios de la Academia de Cine Europeo en una gala repleta de nominados españoles: Pedro Almodóvar recibió un premio de honor a toda su trayectoria, además de tener a sus Amantes Pasajeros como candidatos a Mejor Comedia. La Blancanieves gótica de Berger optaba también a dos de los premios más deseados, el de Mejor Película y el de Mejor Director y el diseñador canario Paco Delgado se llevó la estatuilla a Mejor Vestuario. Si a eso le sumamos la nominación de los cortometrajes ‘Misterio’ y ‘Una historia para los Modlins’, nos queda una presencia de nuestro cine más que envidiable por esos lares lejanos donde el arte es arte y el cine sí es cultura.
Pero, palabrita de Montoro, que eso aquí no cuenta nada. Marca España, no te olvides. Que aquí el arte no es arte. Y el cine no es cine ni es cultura. Palabrita de Montoro que aquí lo que cuenta es la “falta de calidad” y el no a la guerra, si eres rojo o azul, de la gaviota o de la ceja. Que aquí no cuenta que un director que empieza haya metido su corto entre los diez finalistas a los Oscar o que ‘Lo imposible’ haya batido todos los récord por batir. Aquí lo que importa es no hacer ruido, no pensar, no crear y sobre todo sobre todo no mojarse. Así que tres aplausos para Pedro: por su premio, por crear y sobre todo por mojarse.