Al agua para no engordar en Navidad

Finalmente se acabó el período de la «comelona», como le llamo yo a la semanita criminal de Navidad.

Finalmente se acabó el período de la «comelona», como le llamo yo a la semanita criminal de Navidad. Les juro que mañana me despierto y directo al yoga, pero vestida de rojo, porque seguro parezco Santa Claus entre asana y asana. Obviamente ni se me ocurriría ponerme un bañador después de las miles de calorías que me he comido en las últimas 72 horas. Sin embargo, pude haber prevenido pasar el 25 de diciembre jugando a quien come y bebe más. De haberlo sabido, me habría ido a nadar en el puerto de Barcelona en la tradicional Copa Nadal, una de las competiciones deportivas más antiguas de Barcelona y de España.

Se ha realizado cada año desde 1907, a excepción de 1937 y 1938 por causa de la Guerra Civil Española. Nadadores de todas las edades se juntan cada Navidad para realizar esta travesía de 200 metros en aguas abiertas. Incluso muchos se lanzan al agua con disfraces navideños. ¡Que divertido! El año que viene me apunto… Pero a nadar borracha porque el agua debe estar helada.

Dicen por ahí que ha habido años en los que les ha tocado nadar con nieve. Me pregunto como hará Dani Serra, que a sus 45 ha ganado su “décima”. La primera vez que Dani ganó la Copa Nadal fue en 1984, cuando tan solo tenía 16 añitos. ¡Wow! ¡Con ese frío! Le voy a decir que me entrene para el 2014. ¿Quién se apunta conmigo? Mientras tanto sigan comiendo que el año todavía no se acaba. Pero como esta es mi última columna de 2013 aprovecho para desearles a todos un año nuevo MUNDIAL. Nos leemos en el 2014! Xoxo. EK