No volverá a ocurrir
Todas las Navidades los españoles a la misma hora somos testigos directos o indirectos del soberano peñazo de discurso de nuestro Soberano.
Todas las Navidades los españoles a la misma hora somos testigos directos o indirectos del soberano peñazo de discurso de nuestro Soberano.
Todas las Navidades los españoles a la misma hora somos testigos directos o indirectos del soberano peñazo de discurso de nuestro “Soberano”.
La 1 de TVE que soporta este somnífero ve cómo año tras año las pérdidas de audiencia caen masivamente en “curpúsculos” de 350.000 personas, lo que tendría que hacer pensar algo a los que están detrás de esto, digo yo. Un poquito de piedad, por favor.
Calculo que esta situación impuesta por la desmemoria histórica de un país que era República antes del golpe de estado del general Franco, tendrá que seguir padeciendo todavía un buen rato las palabras vacías de este espantapájaros, dado que el tipo según manifiesta “no piensa abdicar”. Parece ser que lo que pretende es “transmitiros como Rey de España mi determinación de continuar estimulando la convivencia cívica en el desempeño fiel del mandato”, y claro, uno se pregunta qué quiere decir este payo o qué es para él la convivencia cívica, teniendo en cuenta que hace un cuarto de hora, el tipo estaba en Botsuana de tapadillo matando elefantes, especie protegida por cierto, en una cacería que tenía los muy regios costes de unos 37.000€, y en la que se lesionó la caderita de marras que tanto por saco nos está dando a los republicanos de la memoria, y que no hay dios que arregle para desesperación de toda la españolidad que paga sus honorarios religiosamente.
Después de todos los escándalos que nos sirven a diario de la mano de sus yernos, en los que la happy family borbónica “noós” ha enmarronado a todos, creo que va siendo hora de irse retirando del mercado, porque las cosas no se arreglan simplemente diciendo “Lo siento mucho. Me he equivocado. No volverá a ocurrir”
