Maquiavélico fraude 11-S
«En términos generales, los hombres son ingratos, volubles, hipócritas, cobardes ante el peligro y codiciosos». Frase que rescato de un ser, como Maquiavelo.
«En términos generales, los hombres son ingratos, volubles, hipócritas, cobardes ante el peligro y codiciosos». Frase que rescato de un ser, como Maquiavelo.
«En términos generales, los hombres son ingratos, volubles, hipócritas, cobardes ante el peligro y codiciosos». Frase que rescato de un ser, como Maquiavelo, que disfrutó de afianzar el poder al déspota en vez de procurar el bien moral y material del pueblo. Parafrasearlo es hablar del despreciable fraude a la seguridad social en Estados Unidos. A las más de cien personas acusadas, la fiscalía suma 32 más. Seres que se han hecho pasar por víctimas de los atentados de las Torres Gemelas. Seres que, sin más objetivo que la codicia, han mentido sobre sus condiciones psiquiátricas, han bebido de la compasión de sus conciudadanos o han enriquecido su ego de ser idolatrados (72 policías implicados y decenas de bomberos). El autor de El Príncipe, creyó en los infiernos del hombre para alcanzar la gloria y, a pesar de vanagloriar la maldad, fueron muchos sus seguidores. Quinientos años más tarde, sus fieles salen de debajo de las piedras y haciendo uso de lo más reprochable: un terrible atentado que golpeó al mundo el 11 de septiembre de 2001. Fraudes de esta magnitud minan el deteriorado crédito de los humanos y dan alas a la eterna dicotomía: el mal contra el bien. No hay argumento, ni causa ni razón que justifique deleznable acción. Pues aunque cierta razón le haya concedido a Maquiavelo, jamás de los jamases el «fin justicia los medios» y, la luz siempre ante la oscuridad, como el bien sobre el mal. Tarde o temprano son cazados, en este caso rozando el patetismo: después de años de mentir y muchos inventándose incapacitación tal como la imposibilidad de escribir en el ordenador, descubren ¿Perfiles de Facebook y Twitter en activo? Pillos maquiavélicos, pero tan faltos de inteligencia…Algunas veces la gran espada invisible aparece para repartir justicia.