Desmayo
Más de 200 trabajadores camboyanos se han desmayado esta semana en una fábrica de ropa de la compañía sueca Hennes & Mauritz (H&M). «Sufrían dolores de cabeza y mareos y fueron llevados al hospital», indicó Keo Pisey.
Más de 200 trabajadores camboyanos se han desmayado esta semana en una fábrica de ropa de la compañía sueca Hennes & Mauritz (H&M). «Sufrían dolores de cabeza y mareos y fueron llevados al hospital», indicó Keo Pisey.
No sé si es un recuerdo o una imaginación mía. Creo que lo primero. Pero me suena la estampa de una madre de las de antes, haciendo una “limpieza general” de esas con amoníaco, que en el afán desinfectante cae desvaída en un desmayo inexplicable para su ignorancia de la química que hasta hace un cuarto de hora desconocía las mascarillas. Así son las cosas del mundo de la economía. Sobre todo de la econosuya. No tenemos más que ver cual es el reguero que ha dejado tras de sí el mundo del amianto, tan aplicado por doquier en los maravillosos 60´s y 70´s a cascoporro en todos los bloques y fábricas en que el mundo obrero resultante del emergente desarrollismo iba a ser albergado, sin saber la amenaza que ésto escondía.
Más de 200 trabajadores camboyanos se han desmayado esta semana en una fábrica de ropa de la compañía sueca Hennes & Mauritz (H&M). «Sufrían dolores de cabeza y mareos y fueron llevados al hospital», indicó Keo Pisey, que explicó que la empresa ha estado utilizando nuevos productos químicos para evitar que los insectos se coman la ropa. Este jueves fueron 136 trabajadores los que se comenzaron a encontrar mal después de que el lunes hubiese 100 desmayos y la fábrica estuviera cerrada durante tres días. La historia se repite de forma secuencial, siendo la salud de los trabajadores lo menos preocupante para el mundo empresarial, si lo que está en juego es la producción y las ventas. Y los de H&M por supuesto van a seguir haciéndose los suecos, como todos esos cabrones que sólo sacan música de una caja registradora.
«El bienestar de los trabajadores es muy importante para nosotros y estamos muy preocupados por la situación de los proveedores», señaló un responsable de la empresa. Tócale los cojones. Y pagando 42 € al mes.