JASP: Jóvenes Aunque Sobradamente Puteados
Si no cabes, te vas. Este país se nos ha quedado pequeño. Y viejo. Y orondo. Repleto de dinosaurios sebosos. Ya no hay sitio para todos y los poderosos no están dispuestos a mover ni un milímetro sus gordos culos para dejar sitio a los que vienen.
Si no cabes, te vas. Este país se nos ha quedado pequeño. Y viejo. Y orondo. Repleto de dinosaurios sebosos. Ya no hay sitio para todos y los poderosos no están dispuestos a mover ni un milímetro sus gordos culos para dejar sitio a los que vienen.
Si no cabes, te vas. Este país se nos ha quedado pequeño. Y viejo. Y orondo. Repleto de dinosaurios sebosos. Ya no hay sitio para todos y los poderosos no están dispuestos a mover ni un milímetro sus gordos culos para dejar sitio a los que vienen. Se han apropiado de sus parcelas, se han dictado sus leyes a medida y se han asegurado unas copiosas jubilaciones que disfrutarán mientras los jóvenes les traemos los cafés, les hacemos las camas o limpiamos la mierda que van soltando, que no es poca.
Si eres joven y aspiras a algo más que a cobrar 1.000 euros al mes por un trabajo cualquiera, este no es tu sitio. De vivir en condiciones ya te puedes olvidar. Y si tenías intención o ganas de tener hijos, mejor déjalo para cuando te puedas emancipar, a eso de los 40. Da igual las carreras que tengas. No importa el talento ni las ganas. Aquí lo que cuenta es tener un tito en el Tribunal de Cuentas o un papá ministro, presidente o alcalde. Recuerda que para ser presidente del Gobierno no hace falta hablar inglés pero te pedirán todo tipo de requisitos para trabajar de camarero, dependiente o administrativo.
España se hace vieja, de cuerpo y de mente. Los jóvenes se marchan desencantados con las maletas repletas de talento mientras los poderosos se quedan anclados en sus butacas de oro. Quedaos con este país de aeropuertos sin aviones y callejones sin salida, de políticos corruptos y princesas imputadas. Quedaos con todo a ver si os atragantáis.
Jack Steinberger, premio Nobel de Física, dijo hace poco en una entrevista: “Tengo muchos años. Y eso significa que hay muchos jóvenes mucho más inteligentes que yo”. Supongo que hay que ser Nobel para llegar a esa conclusión y aquí nos cuesta bastante, en todos los sentidos. Ya lo dijo él: “El país que no emplea a su talento joven se vuelve idiota”. Pues así está el nuestro, pero de remate.