SHALOM
Con la Declaración de Balfour de 1917, la promesa británica de buscar una patria para el pueblo judío, comenzó una emigración masiva de judíos europeos a Palestina que compraban tierras a los árabes.
Con la Declaración de Balfour de 1917, la promesa británica de buscar una patria para el pueblo judío, comenzó una emigración masiva de judíos europeos a Palestina que compraban tierras a los árabes.
Con la Declaración de Balfour de 1917, la promesa británica de buscar una patria para el pueblo judío, comenzó una emigración masiva de judíos europeos a Palestina que compraban tierras a los árabes.
En 1948, fin del mandato británico de Palestina, los colonos judíos habían llegado a adquirir un siete por ciento del total del territorio palestino. Aquella promesa, junto a la deuda moral que mantenía Europa con el pueblo judío por el exterminio de millones de judíos por el régimen nazi, consumó la partición de Palestina y la proclamación del Estado de Israel el 14 de mayo de 1948, provocando una guerra con los árabes. Cuando esta terminó, 750.000 palestinos fueron expulsados de sus casas, convirtiéndose en refugiados en países vecinos. Desde entonces comenzó una larga operación por parte de población judía de ocupación de tierras palestinas así como de guerras de una dureza desproporcionada contra un pueblo, el palestino, que carece de ejército.
La operación “Paz en Galilea” contra Líbano dejó el trágico saldo de más de 900 palestinos asesinados en los campos de refugiados de Sabra y Chatila. En 2008, la operación “Plomo Fundido” causó 1.400 muertes de palestinos y 13 bajas israelíes. La llamada “Pilar defensivo”, en 2012, se cobró la vida de 167 palestino y 6 israelíes. Hoy asistimos a la operación militar “Margen protector” y continúa la masacre de forma impune, ante los ojos horrorizados del mundo. Prácticamente el estado de Palestina hoy día es un inmenso campo de refugiados donde un millón y medio de personas malviven de las ayudas humanitarias. Hace unas semanas, tres israelíes fueron secuestrados y asesinados supuestamente por militantes de Hamas y en respuesta, Israel comenzó con los bombardeos en Gaza asesinando a la población. Como resultado, Hamas lanzó misiles sobre Israel y ahora, Israel ha invadido la franja con tropas armadas.
A día de hoy han muerto el proporcional número de 330 palestinos y 4 israelíes, hay más de 400 heridos y 50.000 refugiados palestinos en colegios de la Agencia de Naciones Unidas para Refugiados Palestinos los cuales se encuentran sin suministros en campos de refugiados ya que necesitan recaudar unos 45 millones de euros solo para poder mantenerlos vivos y que no mueran de hambre y sed.
Este conflicto me recuerda a la lucha entre David y Goliat, solo que esta vez el pueblo israelí, que siempre ha sido David se ha convertido en un terrible y poderoso Goliat, uno que no recuerda bien lo que ha sufrido y que ejecuta con mano de hierro sentencias que él mismo ha dictado. Casualmente las televisiones se llenan de películas del holocausto estos días lo cuál solo me causa un profundo horror, el de saber que las que en su día fueron víctimas hoy día son los verdugos.
