Ya estoy en la nube

Acabo de leer que Twitter me eliminará, o más bien eliminará mi foto cuando la palme y/o mis congéneres lo pidan. La verdad es que ya no estoy preocupado por el más allá. Antes mi mente pululaba entre el cielo, el infierno y el purgatorio.

Acabo de leer que Twitter me eliminará, o más bien eliminará mi foto cuando la palme y/o mis congéneres lo pidan. La verdad es que ya no estoy preocupado por el más allá. Antes mi mente pululaba entre el cielo, el infierno y el purgatorio. Me quitaron el purgatorio. Me quedé con el cielo – el paraíso- y el infierno – ese lugar elegido para torrar mis pecados-.  Lo de Internet va camino de parecerse alcastigo divino. Va camino de ser inmortal.  Ni los juzgados lo conseguirán arreglar.Fijaos: Entras o entran por ti. Publicas o publican algo.

De ti o sobre ti. Te puede gustar o no. Lo que sí te voy diciendo es que estás jodido. Porque en algún lugar remoto, unos señores con unas llaves raras, custodian lo que has «elevado a la nube» y ahí se quedará per secula seculorum. Dicen que nunca se va del todo. Hombre, le estoy cogiendo el gustillo a esto de ser inmortal, pero ya puestos a elegir que me dejen que sea algo con lo que esté de acuerdo. Porque luego me hablan de términos de uso y me la lían. Que sepan que yo ya no me enfado. Antes mi alma dependía de la Biblia. Ahora depende de los Términos de Uso. Es la nueva religión (por eso la pongo en mayúsculas). No tengo ni idea de lo que significa o más bien no quiero saberlo.

Estoy cansado de las letras pequeñas y de pensar que alguien me está haciendo la jugarreta mientras yo acepto de factosus condiciones. Pero bueno soy mayor y entro. Eso sí, como me consideren de interés publico estaré doblemente contento, o quien sabe, doblemente jodido. El caso es que estoy. Para siempre. Me acabo de ganar el cielo y todavía no me he ido. Estoy en la Nube.