El legado de James Foley
Estados Unidos y sus aliados han dejado claro que van a responder al desafío terrorista del Estado Islámico (ISIL). De hecho ya han empezado los bombardeos. Las matanzas indiscriminadas y la ola de asesinatos retransmitidos por Youtube.
Estados Unidos y sus aliados han dejado claro que van a responder al desafío terrorista del Estado Islámico (ISIL). De hecho ya han empezado los bombardeos. Las matanzas indiscriminadas y la ola de asesinatos retransmitidos por Youtube.
Estados Unidos y sus aliados han dejado claro que van a responder al desafío terrorista del Estado Islámico (ISIL). De hecho ya han empezado los bombardeos. Las matanzas indiscriminadas y la ola de asesinatos retransmitidos por Youtube -machete en mano- han provocado quizá lo que buscaban: un enfrentamiento con el mundo occidental.
El desafío es titánico, pero parece evidente que las proclamas de esta gente no pasa ni por la negociación ni por dar marcha atrás a su peculiar “revolución”. Pasar cuchillo por el gaznate del que no piense como ellos se ha convertido en el macabro leit motiv de los yihaidistas. Y para ello han decidido degollar públicamente y con cuenta gotas a sus secuestrados. Cebándose especialmente con los que lleven pasaporte americano.
De lo que quizá no son conscientes estos desaprensivos es que están consiguiendo crear mártires. Personas que pasaban por allí haciendo su trabajo o simplemente ayudando a los que no tienen nada. Profesionales que un día decidieron contar la verdad, aún a riesgo de morir en el intento. La lista que comenzó con el bueno de James Foley crece cada semana.
Estos días he conocido a uno de los parientes cercanos del gran James Foley, cuya serenidad en el momento de la muerte me impactó. He podido conocer la fundación que han creado en su honor (www.jamesfoleyfund.org) y sus objetivos: La construcción de un centro de recursos para las familias de los rehenes estadounidenses y el fomento de un diálogo mundial sobre las políticas gubernamentales en crisis de rehenes. El apoyo a los periodistas estadounidenses que informan desde zonas de conflicto, y la promoción de oportunidades educativas de calidad para los jóvenes.
Estoy convencido de que el legado de James será fructífero. Esta fundación nos servirá para tener presente a los que un día dieron su vida sin saber que tendrían este final. Pero la muerte para los creyentes como Foley no es el final y quizá por eso todos nos quedamos impactados por su entereza.
Tu memoria permanecerá para siempre.
Gracias.