Precaución, amigo procreador

Ni pederastas, ni explotación infantil, ni políticos que recorten en educación y sanidad; los que son realmente peligrosos para un niño son sus padres. Si estuviese en mi mano, a los progenitores de este bebé no sólo les quitaría la custodia, también los dejaría borrachos al borde del precipicio y les obligaría a hacerse un selfie.

Ni pederastas, ni explotación infantil, ni políticos que recorten en educación y sanidad; los que son realmente peligrosos para un niño son sus padres. Si estuviese en mi mano, a los progenitores de este bebé no sólo les quitaría la custodia, también los dejaría borrachos al borde del precipicio y les obligaría a hacerse un selfie. Lo malo es que sobrevivan y cuenten su historia en un libro para sacar pasta, como la madre de Madeleine. Con padres como estos, ¿para qué quieren los niños a dueños de empresas textiles…?

Siempre he dicho que la naturaleza no es sabia cuando cualquiera puede tener hijos (sin ir más lejos yo tengo dos), pero al menos nosotros deberíamos serlo. La misión de un padre es proteger a su prole hasta que sea lo suficientemente madura como para hacerlo ellos mismos, así que no comprendo cómo les dejan conducir un quad, les regalan un pitbull o les ponen «Mujeres y Hombres y Viceversa». ¿Quién quiere tener hijos para ver cómo sufren? ¿Acaso se creen Dios?.
Yo voto por poner un carnet por puntos para ser padre y, cada vez que cometas un error, que te penalicen. Si los pierdes todos retirada de custodia, como con el de conducir. ¿Que dejas a tu hijo sólo en el coche mientras vas a hacer un recado rápido? 4 puntos menos. ¿Que le das agua con vino en el biberón porque eso se ha hecho toda la vida en tu pueblo? 4 puntos menos. ¿Que lo dejas sólo en casa para irte de fiesta? 8 puntos menos. Y una hostia. 

Si los padres tuviéramos que dar cuentas de la educación y cuidado de nuestros hijos nos iría mucho mejor a todos. Nos exigen resultados de nuestros estudios, de nuestro trabajo, pero la sociedad no nos pide cuentas de cómo cuidamos el activo más importante que tiene una nación: sus niños. Se vigila más el bienestar de un lince ibérico o la preservación de un Picasso que la calidad de vida de un niño. Total, niños hay muchos y si aprueban la ley del aborto, muchos más. Para qué cuidar lo que abunda.