Obama, acorralado
¿De verdad se creen ustedes que un desconocido puede saltar la verja de la Casa Blanca, atravesar la explanada que conduce a su puerta, abrirla y penetrar en los pasillos hasta llegar al ala Este sin la aprobación de los propios servicios de seguridad?
¿De verdad se creen ustedes que un desconocido puede saltar la verja de la Casa Blanca, atravesar la explanada que conduce a su puerta, abrirla y penetrar en los pasillos hasta llegar al ala Este sin la aprobación de los propios servicios de seguridad?
¿De verdad se creen ustedes que un desconocido puede saltar la verja de la Casa Blanca, atravesar la explanada que conduce a su puerta, abrirla y penetrar en los pasillos hasta llegar al ala Este sin la aprobación de los propios servicios de seguridad? (¿Recuerdan ustedes la película del año pasado…?).
Para comprender este inusual suceso, habría que reparar en los sucesos que están ocurriendo ahora mismo y que estarían en el origen de una sublevación en ciernes. Principalmente, la ansiada revaluación del dinar y la vuelta al patrón-oro que Obama está bloqueando desde el año 2010, fecha en la que el FMI aprobó una remodelación de la “bolsa de monedas” que componen los Derechos Especiales de Giro, que incluirían al renmibi chino.
En las mismas fechas en las que sucedía ese inusual “Asalto a la Casa Blanca”, el congresista Lamborn incitaba a los generales norteamericanos a dimitir por la falta de contundencia de Obama a la hora de perseguir a las huestes “islámicas”. Mandato que han seguido varios generales retirados que participaron en la segunda invasión de Irak (2004) y que han sugerido una rebelión de las fuerzas armadas si Obama no pone todo su poder para acabar con el Estado Islámico.
El comentarista Ulsterman afirma que Obama, quien ha armado a estos mismos grupos en Libia y Siria, estaría avisándoles de los ataques del propio ejército USA, con el fin de que no revelen los vínculos de la Secretaría de Estado norteamericana con el ataque contra el consulado USA en Bengasi, Libia, y que acabó con la vida del embajador Stevens. Este hecho habría suscitado un ultimátum del Pentágono, que está muy implicado en la revaluación del dinar como paso para la cancelación de la Reserva Federal.
Las presiones sobre la inacción del gobierno acerca del desfalco de la Reserva Federal en su «rescate» a los cinco grandes bancos estarían en el origen de la renuncia del Fiscal General Eric Holder. Argumento que se valida porque al día siguiente de anunciarlo se hizo público que la funcionaria de origen hispano Carmen Segarra, encargada de auditar las ayudas a Goldman Sachs, dispone de 45 horas de grabación que prueban la connivencia de la Reserva Federal con este banco. Eric Holder lo sabía y no hizo nada.