La mamola de Artur Mas
Creen que deben permanecer unidos para poder separarse. Esa es la idea. Además, Mas piensa que necesita mantener cerca a Junqueras para vencerle. Y Junqueras considera imprescindible conservar próximo a Mas para derrotarlo.
Creen que deben permanecer unidos para poder separarse. Esa es la idea. Además, Mas piensa que necesita mantener cerca a Junqueras para vencerle. Y Junqueras considera imprescindible conservar próximo a Mas para derrotarlo.
Creen que deben permanecer unidos para poder separarse. Esa es la idea. Además, Mas piensa que necesita mantener cerca a Junqueras para vencerle. Y Junqueras considera imprescindible conservar próximo a Mas para derrotarlo. Y en medio del galimatías, Cataluña se la juega. Se la juegan. Así es como Mas y Junqueras se hacen la mamola entre sí, y juntos le hacen la mamola a los catalanes.
Hacer la mamola es engañar al prójimo con caricias fingidas tratándolo de bobo. Hacer la mamola es engatusar a los ciudadanos con la absurda idea de que independencia es prosperidad. Hacer la mamola es embaucar a la gente con la falsa promesa de que una Cataluña independiente seguiría formando parte de la Unión Europea. Hacer la mamola es hacer creer a los catalanes que España les roba cuando son otros catalanes los que les trincan la pela para disimularla en Andorra. Hacer la mamola es dar gato por liebre, secesión por derecho a decidir, referéndum por consulta y consulta por proceso de participación.
Mas ha demostrado sobradamente su incapacidad como gestor, multiplicando la ruina que el tripartito le legó en la Generalitat, y su ineptitud política al conducir su partido a la mayor debacle electoral de su historia. Pero su mérito indiscutible reside en su capacidad para sumar compinches al trampantojo, socios de convergencia y conveniencia incorporados a la trapacería. Los independentistas han decidido depender del simulacro de referéndum, tragando con el timo de las urnas de pega y del censo inexistente. Sigue la mamola. Apoyan la chifladura de Mas y le exigen a cambio el adelanto electoral. Mas les volverá a hacer la mamola. En esta caterva de impostores ya sólo falta el pequeño Nicolás. La Generalitat debería ficharlo urgentemente como asesor.