He visto morir a Muaz
Han provocado en mí un dolor que no he conseguido sacarme del pecho desde hace varias horas. El resto de mis sentimientos los he dejado en casa.
Han provocado en mí un dolor que no he conseguido sacarme del pecho desde hace varias horas. El resto de mis sentimientos los he dejado en casa.
He visto morir a Muaz Kasasbeh en menos de un minuto. De rodillas. En solo 13 milésimas tu cerebro procesa una imagen como esa. Sí. He visto la secuencia entera para saber de lo que estaba hablando.
No pienso compartir con vosotros nada más. Tampoco os diré que esas imágenes deben censurarse por internet. No las veáis, por favor. Será bueno para vuestra salud mental. No necesitáis ningún detalle más para saber con quién nos estamos enfrentando.
Han provocado en mí un dolor que no he conseguido sacarme del pecho desde hace varias horas. El resto de mis sentimientos los he dejado en casa.
“Los imbéciles”, como decía Charlie, han cambiado las capuchas negras por uniformes. Ya no van de verdugos. Quieren justificarse en pos del “cumplimiento de sus obligaciones de guerra”. Renuevan su forma de matar para mantener al mundo en tensión. Después de tanta decapitación no nos vayamos a acostumbrar. Muestran su propia interpretación de los versículos del Corán y queman al piloto igual que “él quemó a los nuestros con sus misiles”.
Querían una guerra contra el infiel Occidente y los torpes han conseguido que todo Oriente Medio y gente como los Hermanos Musulmanes o los letrados de Al Azhar les digan que sus actos son crímenes contra los principios islámicos.
Mi amiga Amina llega un día a casa ataviada con su hiyab, como siempre. Justo tras lo de Charlie Hebdo. “Son unos animales. El Corán dice que no matemos”, dice. “Amina, no vale la pena hablar de esto”, le comento. En el fondo supongo que necesitaba justificarse. Para mí simplemente es mi amiga. “No hablemos de política y sobre todo que no manchen la religión”. Conversación finiquitada.
Es su guerra. La de ISIS. Que no se justifiquen tras un texto sagrado como el Corán, ni tras la Yihad que precisamente no es un acto de guerra. Curiosamente Yihad significa esfuerzo y “lucha contra cualquier injusticia”. Yo ya tengo mi interpretación.
PD: Recomendación de la semana. “¿Qué dice el Islam acerca del terrorismo?” www.musulmanesandaluces.org.