Iglesia de mercado
El Papa Francisco lo tiene bastante jodido. Su claro objetivo de administrar con transparencia y eficacia los bienes de la Iglesia con especial atención hacia los más necesitados entra en conflicto con los intereses reales de la iglesia castrense oficial.
El Papa Francisco lo tiene bastante jodido. Su claro objetivo de administrar con transparencia y eficacia los bienes de la Iglesia con especial atención hacia los más necesitados entra en conflicto con los intereses reales de la iglesia castrense oficial.
<Se acercaba la Pascua de los judíos. Jesús subió a Jerusalén, y halló en el templo vendedores de bueyes, ovejas y palomas, y cambistas sentados. Hizo un azote de cuerdas, y los echó a todos del Templo con las ovejas y los bueyes, tiró las monedas de los cambistas y volcó las mesas. Y dijo a los vendedores de palomas: “Quitad esto de aquí: no hagáis de la casa de mi Padre un mercado”. Sus discípulos se acordaron que está escrito: “El celo de tu casa me devora”.Entonces los judíos le dijeron: “¿Que señal nos das para obrar así?” Jesús les respondió: “Destruid éste templo y en tres días lo levantaré”. Los judíos le replicaron: Se edificó el templo en cuarenta y seis años, ¿Y tú lo levantarás en tres días?” Más Él hablaba del Templo de su cuerpo.> Sn. Jn. II, 13-22
Esto es lo que dicen las sagradas escrituras para los católicos, y desde que existen, el invento de la “Iglesia” no ha hecho otra cosa desde su núcleo duro que recaudar, quemar a “brujas” en la hoguera, expandir su poder político, y desarrollar el colegueo con los gobernantes de turno, echando agua bendita sobre todas las atrocidades bélicas que en el mundo han sido, para mayor gloria de dios. Y en nuestros días, desarrollar toda una red de pederastia, y participar activamente en la fiesta de la corrupción financiera desde el Banco Ambrosiano y actualmente el Banco Vaticano.
El Papa Francisco lo tiene bastante jodido. Su claro objetivo de administrar con “transparencia y eficacia” los bienes de la Iglesia “con especial atención hacia los más necesitados” entra en conflicto con los intereses reales de la iglesia “castrense” oficial. Se encuentra de nuevo en la tesitura que llevó a Jesucristo a echar a los “mercaderes” del templo, pero está rodeado de una camarilla de prelados corruptos que guarecidos en la sombra, distan mucho del mensaje evangélico, y esa peligrosa camarilla, ya se ha llevado de calle con los pies por delante o por detrás a más de un Papa.
A ver quién gana la batalla. Desde mi agnosticismo, rezo para que gane él.
