Qué hay de lo mío

A estas alturas del partido, aún no he podido escuchar a ningún candidato nada sobre lo mío. Lo mío es muy sencillo, pero nadie habla de ello.

Llegamos al ecuador de la campaña electoral y vemos con cierto hartazgo como nos llenan todos los espacios informativos, tertulias y todo nuestro tiempo libre con lo que han dicho unos y otros sobre lo que dicen van a hacer o dejar de hacer.

A estas alturas del partido, aún no he podido escuchar a ningún candidato nada sobre lo mío. Lo mío es muy sencillo, pero nadie habla de ello.

A mi me gustaría que las aceras de mi municipio estuvieran limpias y que los restaurantes de la zona no dejen toda la basura en la calle a la espera de gatos, ratones y otros roedores pasen a recenar. Me gustaría no hubiese tantas rotondas, ni tantas maquinitas de parking para sacarme el dinero por unos señores de una subcontrada que van a porcentaje. Me gustaría que cuando tengo que hacer un trámite con la administración, no me hagan perder dos mañanas y justo cuando me van a atender sale el funcionario a tomar café porque es su turno. Yo no tengo tiempo para tomar café.

Me gustaría un municipio y una comunidad que no recaude sin límite, y me explique mucho mejor los presupuestos de gastos, y en qué se van a gastar el dinero de los impuestos. Me gustaría un municipio y una comunidad solidarios, pero no presos de unas minorías.

Quiero un municipio que no se gaste tanto dinero en fiestas cuando estas llegan en verano, dando un dineral a cantantes y demás farándula cuando el alumbrado de la calle esta por terminar. Quiero una policía local bien pagada, pero que no hace falta que vaya motorizada con motocicletas de importación.

Señores candidatos, que hay de lo mío.