45 mil euros por insultar pobres

Esta falsa moral que jamás atiende el problema de fondo es lo que tiene sumergido en estiércol la práctica política de los gobiernos ambiguos, amorfos, o gobiernos «nini», ni de derecha ni de izquierda, ni de centro, ni de nada.

¿El Parlamento francés aprobará una ley para proteger a los más desfavorecidos? Multas de 45.000 euros por insultar a los pobres pagará el infractor, pero eso si, el insultado seguirá siendo pobre. Y es que para los legisladores franceses es más fácil legislar sobre las consecuencias de la pobreza que sobre la pobreza misma.

Esta falsa moral que jamás atiende el problema de fondo es lo que tiene sumergido en estiércol la práctica política de los gobiernos ambiguos, amorfos, o gobiernos «nini», ni de derecha ni de izquierda, ni de centro, ni de nada. En especial en un parlamento francés.

La ironía de una decisión como esta es ¿en qué resuelve multar al que ofende a un pobre? ¿Es que todo aquel que ofende a otro sin motivo ni razón no tendría que ser sancionado? ¿Será el Estado francés el primer sancionado y a quién pagará por las ofensas a cada uno de los pobres que día tras día hace más pobres?

Lo peor es que es posible que esta legislación puede tomarse como referencia mundial de lucha contra la pobreza, o se afirme con vehemencia en todo el mundo que esta es la fórmula para, como dice la leyenda de la foto en www.theobjective.com: «proteger a los desfavorecidos». «Por Dios», diría hasta un ateo.

Creo al final, que la mejor forma de leer esta nota maravillosa es de la siguiente manera: «ricos pagaran al Estado 45.000 euros para poder insultar a los pobres». Esto parecería más ajustado a la realidad.