¿Me retuiteas?
En una primera mirada no se nota; necesitas desenfocar a la pareja para advertir el pescuezo del calvo y entonces el higadillo que supura por el cuello te sale a ti por la boca.
En una primera mirada no se nota; necesitas desenfocar a la pareja para advertir el pescuezo del calvo y entonces el higadillo que supura por el cuello te sale a ti por la boca.
En una primera mirada no se nota; necesitas desenfocar a la pareja para advertir el pescuezo del calvo y entonces el higadillo que supura por el cuello te sale a ti por la boca. Me sorprende que nadie alrededor se inmute, porque las señoras del fondo siguen engullendo hamburguesas como si el mundo fuera acabarse en menos que dura un episodio de Walking Dead. El modo en que contemplamos lo que sucede ha virado radicalmente: uno presencia un cataclismo y lo “instagramea”. Vas al fútbol o a un concierto y si no te haces selfie no has estado. Una amiga me cuenta que a sus hijas les interesa más tuitearse con sus artistas favoritos que escucharles en directo. La vida es lo que sucede dentro de una foto.
Volviendo a la nuestra, siento que lo esperpéntico y lo corriente se dan la mano en un escenario donde la mesura se ha erigido en una rareza.
Hace días, en una de las presentaciones de mi última novela –“Mientras llueva”, ya aprovecho y os lo cuento-, alguien me aseguró que mis ademanes no se correspondían a los de esta época. A pesar de que escribir conlleve una exposición no termino de acomodarme en esa clase de juicio donde alguien trata de adivinar tanto de ti. “Tienes cierta feminidad frágil que no se ve por el mundo”. “Soy fuerte”, respondí sintiéndome atacada en mi línea de flotación. Tardé en entenderlo. No estaba valorando mi capacidad de enfrentarme a la adversidad, al contrario intuía mi yo sensible. Vaya, que sigo siendo de las que prefiere contemplar una puesta de sol que fotografiarla. Un abrazo en lugar de decenas de emoticonos. Un beso antes que un polvo virtual.
Debo de ser rara, sí, pero no tanto como para ocultarte que muero por tu retuit.