El sátrapa

Un sátrapa, hoy en este texto, no tiene la acepción de «gobernador de una provincia de la antigua Persia», como podría sugerir el título a aquellos lectores verdaderamente cultos o aficionados al diccionario. La definición a la que me agarro es la de «aquella persona que gobierna despótica y arbitrariamente y haciendo ostentación de su poder». Es decir, voy a escribir sobre un tirano, y he decidido hacerlo porque me hallo absolutamente perplejo y asqueado de ver imponer el rodillo dictatorial (enmascarado de democracia) a otro tiranillo indocumentado de izquierdas, sin que la sociedad se movilice de verdad pues la mayoría de la gente desconoce sus fechorías. Leyendo esto, la mayoría de ustedes pensaran inmediatamente que me estoy refiriendo al canalla de Maduro, ese personajillo venezolano que tiene hundida en la miseria a nuestros hermanos venezolanos. Pero, no, no será el dictadorzuelo venezolano el objeto de mi columna de hoy, pero si lo fuera las conclusiones serían las mismas. Toda esta gentuza comunista, populista, iletrada y despótica son la misma calaña.

Para hacer la lectura del artículo de hoy algo más amena (siendo un tema tan triste), voy a plantearlo en forma de adivinanza. Iré desvelando pistas sobre el sujeto en cuestión a lo largo del texto para que vayan intuyendo de qué totalitario de pacotilla estamos hablando. Porque mi intención es que al final del texto se sorprendan con el aluvión de maldades que ha cometido nuestro sátrapa, se den cuenta de lo inmoral que es conocer la verdad y no hacer nada, y por tanto se vean obligados a movilizarse en las redes para generar una corriente de rechazo nacional, y en Hispanoamérica, que exponga de una vez por todas a este mísero individuo. 

Adivina adivinanza, una adivinanza te voy a poner, a ver si adivinas quien es el sátrapa que queremos reconocer hoy:

1) El despreciable sujeto en cuestión ha sido acusado por su propia hija de violaciones repetidas entre los 11 y los 19 años. Su mujer, y madre de la criatura, se ha alineado con el tirano, a cambio de ser nombrada vicepresidente del gobierno del país en cuestión (por cierto algo muy en la tradición comunista como con nuestro ex-vicepresidente del gobierno Iglesias y su mujer ministra). Los jueces desestimaron el caso entre otras excusas por temas de procedimiento y haber prescrito los cargos.

2) El tirano, de acabar este último mandato para el que acaba de ser elegido en las elecciones sumará veinte años consecutivos en el poder y un total de veintinueve años de gobierno. 

3) Bajo el gobierno del déspota y de su totalitaria esposa, y en especial durante la represión de las protestas del 2010, se han sucedido cientos de asesinados, han tenido que emigrar 130.000 exiliados del país (un 2% de la población) y se han producido casi 200 detenciones políticas.

4) El autócrata ha desarticulado a la oposición policialmente, los siete aspirantes alternativos al poder se encuentran en prisión acusados de «traición a la patria». Más tarde se detuvo a integrantes de las ONG, y posteriormente cayeron sus antiguos aliados exguerrilleros, periodistas y ya casi de manera cómico-trágica hasta una miss del país que se atrevió a entrar de vicepresidenta en una lista. Hasta su hermano mayor, antiguo jefe del Ejército designado por él, rompió con su hermano pequeño, y ha pedido la libertad de los presos políticos.

5) Los hijos del opresor y la bruja (es conocida por su afición al brujería, por ende – ¡bruja!) copan todos los puestos jugosos de la administración pública y la empresa privada, y como suele ocurrir, el saqueo del país es el negocio familiar.

6) Los canales de TV críticos han sido desmantelados por el gobierno del cáncer de la libertad.

7) El tiranosaurio ha conseguido que el país sea el segundo país más pobre de su entorno, solo por detrás de Haití. Su Seguridad Social está en quiebra. El 26% de los hogares se queda habitualmente sin alimentos. El 44% vive por debajo del umbral de la pobreza.

8) El número de trabajadores públicos de la nación del cacique ha pasado de 40.000 a casi 170.000 ¡Cuándo aprenderemos que el empleo público no crea riqueza, sino que la consume!

9) Los dos últimos colaboradores de El País han tenido que abandonar el país para evitar ser detenidos.

10) El miedo impera en las calles y en la sociedad. Cunde el pánico de ser señalado a dedo por los perversos Consejos del Poder Ciudadano (CPC), que no son mas que órganos para delatar creados a imagen y semejanza de los comités de Defensa de la Revolución cubana para el espionaje vecinal. Es un estado policial. Los CPC se esforzaban hasta última hora de la jornada de reflexión, movilizándose puerta por puerta, listas en mano para arrastrar a las urnas al mayor número de gente posible. La estrategia es el llamado «1×10» consistente en que cada simpatizante, trabajador público o militante del partido en el poder debe llevar a 10 personas a votar, algo que siempre le ha dado buenos resultados al chavismo en Venezuela. La misma estrategia se sigue en los centros de trabajo.

11) De entre los únicos cinco partidos permitidos en las últimas elecciones, ninguno de los candidatos de la oposición son conocidos, y su historial político es intrascendente. En la campaña la oposición disfruta de diminutos carteles en las calles, con las caras de candidatos que pocos conocen y cuyo peso e historial político es intranscendente. En contraste, los «Ceaucescu» locales aparecen en carteles gigantes en las fachadas de las instituciones del estado.

12) En las elecciones antes había fraude, ahora es una farsa. Abstención o voto, ese es el dilema. 

13) La empresa de encuestas del gobierno (M&R) anticipaba que el maldito sátrapa tenía un apoyo del 75%, lo que auguraba que se atribuirá la victoria las elecciones con más del 70% de los votos (hecho que se ha consumado). La empresa Gallup, sin embargo, publicó hace pocas fechas que su apoyo no pasa del 19%.

14) Ningún organismo de observación internacional estuvo presente en las recientes elecciones para dar cuenta del proceso electoral, del pucherazo presidencial de la dupla diabólica.

15) El chupasangre presidencial se apropió masivamente de viviendas para uso particular antes de dejar el poder en 1990. Precisamente la actual casa del matrimonio diabólico presidencial, que es también su despacho, y la sede del Gobierno, y la dirección de su partido está ubicada en una rica colonia de la capital, que fue expropiada a un empresario llamado JMC en 1979. El tiranosaurios Rex vivió como presidente en ella desde el 1979 a 1990, pero tras perder las elecciones se quedó con la casa. Y allí sigue.

Hemos llegado al final querido lector, y si a estas alturas no intuye de quién le hablo, si sé que le habré dejado en la boca un reducto a bilis, en el corazón un soplo de dolor y en la mente un grito de injusticia. Parafraseando al poeta Nicanor Parra, que Dios nos libre de estos demonios / si todavía sigue siendo Dios. Porque hoy hablo del maldito presidente comunista de Nicaragua, Daniel Ortega y de la bruja de su mujer, su vicepresidenta Rosario Murillo, los dos tétricos liberticidas que gobiernan Nicaragua. Su odio, y sus egos, han ocupado todo el espacio. Son el resentimiento personificado y la definición de la maldad. Pero como lo más peligroso del mal es que uno se puede acostumbrar a tolerarlo, demos un golpe en la mesa y decidamos no acostumbrarnos al mal que ha incubado en nuestra nación hermana de Nicaragua: desalojemos al dictador y a su cómplice del poder y arrojémoslos a los arrabales de la historia.

¡Viva Nicaragua libre, y viva Venezuela libre!