¿Dónde se ha metido Irene?
«Es inexplicable que las mandamases de Podemos, todas ellas mujeres feministas, hayan estado calladas ante el momento crucial que vive su partido»
¿Dónde está Irene Montero? ¿Dónde Ione Belarra y Lilith Verstrynge? ¿Por qué está callada la inefable Pam? ¿A qué viene este silencio de las mujeres más destacadas de Podemos?
Yolanda Díaz finalizó su intervención en el Magariños al mediodía del domingo, y no se pronunciaron ese día. Tampoco a lo largo del lunes. Fueron Pablo Iglesias y Alberto Garzón los que opinaron sobre el proyecto de Yolanda Díaz, el futuro de Yolanda Díaz, el comportamiento de Yolanda Díaz con Podemos, el partido al que tanto debe. Pero es inexplicable que las oficialmente mandamases de Podemos, todas ellas mujeres feministas, a las que no se le va de la boca la palabra empoderamiento, hayan estado calladas ante el momento crucial que vive su partido, permitiendo que sean dos hombres los que opinen sobre lo ocurrido. Defendiendo distintas posturas, contrapuestas posturas, pero pronunciándose los dos sobre Podemos dejando al margen a las dirigentes de Podemos.
Uno de ellos es Pablo Iglesias, que ante un revés político –provocado por una mujer, Isabel Ayuso- renunció públicamente a continuar en política y a ser el máximo líder de Podemos, aunque sabe todo el mundo que es quien hace y deshace en ese partido y no se toma una sola decisión que no venga avalada, ordenada o inducida por Iglesias. Lo que ya da una pista sobre cuál es el grado de libertad de Montero y Belarra para marcar el camino. El otro hombre que se ha pronunciado es Garzón, del que se supone que pertenece al conglomerado de Podemos a través de la alianza electoral entre ese partido e Izquierda Unida, aunque hace ya mucho que apostó por Yolanda Díaz. Ni Yolanda ni Garzón, alejados de Podemos, por no decir disidentes, han tenido lo que hay que tener para abandonar el Gobierno en el que fueron colocados por Podemos.
Tampoco puede extrañar mucho: Garzón no ha protestado ninguna de las veces que los miembros del Ejecutivo, sus compañeros, no apoyaron sus iniciativas porque las consideraban inadecuadas o irrelevantes. En cuanto a Yolanda, los que conocen su trayectoria política saben de sobra cómo actúa cuando se trata de conseguir un objetivo: deja de lado a quienes más la han ayudado. El último es Iglesias; el próximo será Sánchez. Si no, al tiempo.
«Las feministas de Podemos enarbolan banderas que son puro postureo»
Pero estábamos con las mujeres que más mandan en Podemos. ¿Qué pasa con ellas? ¿Hace falta darles un empujón para que den la cara? Porque en cuarenta y tantas horas no la han dado. Han permitido que otros, o más bien otro, varón, hombre, haya hablado por ellas. Porque Garzón no ha defendido a Podemos, más bien todo lo contrario; ha sido Pablo Iglesias el que ha actuado como portavoz de la dirección podemita.
Se cargan de razón una vez más las mujeres feministas comprometidas cuando dicen que las feministas de Podemos enarbolan banderas que son puro postureo. Son las primeras las que han batallado de verdad y se han dejado la piel por defender la igualdad; las que no han parado hasta que se cambiaran leyes y se aprobaran otras que recogen que las mujeres tienen los mismos derechos que el hombre. Son ellas las que siguieron luchando después para que esas leyes se cumplieran en todos sus términos. Como lucharon, cuestión de máxima relevancia, para que la sociedad comprendiera que las mujeres valen tanto como los hombres o más, y que hay que darles todas las oportunidades para demostrarlo.
La mudez de Montero, Belarra y Cia. da que pensar. ¿No se les ocurre nada que decir cuándo una compañera, que antes fue amiga, las deja tiradas a pesar de que esa compañera que antes fue amiga les debe absolutamente todo? ¿Tampoco saben qué decir cuándo su partido, Podemos, ha sido apuñalado por la espalda y está en juego su supervivencia? ¿Qué pasa, que consideran que Pablo Iglesias se expresa mejor que ellas, que Pablo Iglesias ya habla por ellas, que es Pablo Iglesias, que no pertenece a la dirección de Podemos, el que tiene que opinar sobre el partido que ellas dirigen?
Que lo expliquen. Porque aunque se dediquen ahora a aparecer en todos los medios, televisiones, emisoras, prensa escrita y digital, y organicen mítines y grupos de trabajo, si lo hacen, es tarde: Pablo Iglesias ya ha hablado por ellas.