THE OBJECTIVE
Román Cendoya

'El 1' en corrupción

«Sánchez está en una huida hacia adelante. La realidad política demanda una brutal regeneración. La convocatoria de elecciones es la respuesta democrática»

Opinión
22 comentarios
‘El 1’ en corrupción

Ilustración de Alejandra Svriz

El comando Sánchez fue, es y será José Luis Ábalos, Santos Cerdán, Koldo y Begoña. A ese núcleo de escoria democrática se han ido sumando posteriormente voluntarios que se acercaban el hedor del poder y las prácticas corruptas sin freno. La política como medio para la progresión social y económica. Todo les valía para okupar el poder. Ésa es la forma de servir al pueblo de la izquierda palmera y sumisa. No puede ser una sorpresa para nadie. ¿Qué puede esperarse de un tipo capaz de esconder una urna detrás de una mampara de su sede, para falsificar el resultado democrático mediante un pucherazo? Fue en 2016. De gente que actúa así jamás puede esperarse nada bueno. Todo personaje que sea corrompible aterriza en el entorno de Pedro Sánchez. Lo de Sánchez y su entorno es corrupción generalizada.         

La situación de corrupción y degeneración democrática es una realidad claramente percibida por la ciudadanía que provoca un legítimo rechazo contra Sánchez. Eso lleva al presidente a alejarse lo máximo posible de los ciudadanos. El autócrata no va a llegar como presidente al próximo día de la Hispanidad, pero si lo hiciera obligaría a que la marcha militar fuera en el Paseo del Prado y que situaran al público en Guadalajara. Es un despropósito en sí mismo. Pedro Sánchez es un presidente del Gobierno que es alérgico al pueblo español. Hasta el clima está contra él. Lo mejor del desfile fue el tiempo. No se lo merecían ninguno de los que desfilaban, ni el público, pero fue bonito ver cómo la naturaleza contextualizaba la realidad del gobierno. Está a punto de ahogarse y hundido en un charco de corrupción. Eso es el sanchismo.

Pedro Sánchez ya ha perdido el glamour que le rodeaba. Se viste igual, pero lo que antes era moderno y progre ahora es ir hecho un vulgar zafio que se presenta al desfile vestido como si fuera a recoger setas. En su creación de la realidad empieza a ser el rey desnudo. El día del desfile y la recepción cometió un grave error: la ausencia de Begoña. Esconderla la hizo mucho más visible y mucho más culpable.

Los Sánchez han pasado de ponerse —como paletos— junto a los Reyes pretendiendo saludar a los invitados a desaparecer por ser una investigada. Muy torpe pensar que si no se la ve no pasa. Pasa y mucho. La causa judicial contra su mujer sigue adelante. Y sus demandas y querellas contra el juez de instrucción van para atrás.

Pedro Sánchez es el primero en muchas cosas. Vaya por delante que ser el primero no significa ser el mejor. Fue el primero en asaltar el poder en una moción de censura. El primero en hacer un gobierno de coalición con comunistas. El primero en pactar con los herederos políticos de los terroristas. El primero en poner a su ministra de fiscal general del Estado. El primero en colocar en puestos independientes a militantes y ministros. El primero en declarar el Sáhara territorio marroquí. Amnistía, indultos … es el primero en todo tipo de atrocidades políticas, éticas y legales. Pedro Sánchez es el primero en arrastrar, por su esposa, a la imputación al fiscal general del Estado. Pedro Sánchez es el primer presidente en cabrear a mucho CNI, a la Guardia Civil y a parte fundamental de la judicatura. Ser «el 1» de tantas cosas no puede terminar bien.

«Su ‘bien’ a José Luis Ábalos lo convierte en cómplice y responsable de todo lo que aquel viaje supuso»

Así, en el peor momento posible para Pedro Sánchez, la UCO ha conseguido traer al presente lo peor de su pasado. Sólo con alguno de los teléfonos, tabletas y ordenadores de Aldama y Koldo ya han podido descubrir que Pedro Sánchez, el 16 de enero de 2020, autorizó la llegada de Delcy Rodríguez. Su «bien» a José Luis Ábalos lo convierte en cómplice y responsable de todo lo que aquel viaje supuso. Él es «el 1» en fango, bulos y fakes. Sólo con el caso Delcy Rodríguez lleva cuatro años llenando de mentiras y falsedades las actas oficiales del Congreso y del Senado.

Víctor Aldama es el engranaje de unión entre todos los partícipes de la degeneración. Está preso por un fraude de IVA con estaciones de servicio. Su gran fortuna y su no vínculo político con el núcleo duro de Sánchez lo convierten en un problema. Puede salvar parte de su fortuna y negociar una mínima condena a cambio de colaborar con la justicia. Los tiros en su coche tienen más difícil solución.

El único recurso que le queda al Gobierno es lanzar fango desde todos sus medios y poner a trabajar sus repugnantes antenas mediáticas. Creen que les sirve cualquier cosa para tapar el hedor.

El Ministerio de Transición Ecológica mezcla los fraudes del IVA de Aldama con expedientes administrativos —nada que ver— suspendiendo la actividad a cuatro empresas del sector. ¿Y? Puro fango gubernamental para intentar tapar la porquería del presidente. La gubernamental cadena SER, a través de su comisaria política Angels Barceló, leyó toda una serie de bulos, fakes y fango sobre «la mafia del diesel». Escucharla producía arcadas pensando que alguien pueda creer a esa garganta que regurgita fango como que «uno de cada cuatro litros que se repostan en las gasolineras son de diesel comprado en fraude».

«Es ridículo que el Gobierno se eche a la calle para reivindicar el derecho a la vivienda para desviar la atención sobre la corrupción»

Si fuera cierto habría que destacar que semejante fraude habría sido consentido, alimentado y permitido por el Gobierno de Sánchez. A la pseudo periodista no se le ocurrió preguntar: ¿y cuántos ministros han dimitido o han sido cesados? Es ridículo que el Gobierno se eche a la calle para reivindicar el derecho a la vivienda con el objetivo de desviar la atención sobre la corrupción. Hay que recordar que Pedro Sánchez lleva de presidente del Gobierno más de seis años. Es decir, todo lo que sucede es responsabilidad, por acción u omisión, de este Gobierno y su total inutilidad. Los pseudomedios de la corrupto-esfera se ponen en evidencia ante el tratamiento que dan a la actualidad. Transmiten la preocupación que les produce la implicación general del sanchismo.

Es que la lista de implicados y afectados, con lo poco que por el momento ha salido, es tan larga como importante. Además de los ya conocidos Aldama, Ábalos, Koldo con su mujer y su hermano, hay que incluir a Santos Cerdán, Nadia Calviño, María Jesús Montero, Reyes Maroto, Marlaska, Salvador Illa, Víctor Torres, Armengol, Concepción Andreu y Álvaro García Ortiz. Todos alrededor de «el 1», su esposa y hermano. Esta porquería es el sanchismo. Una realidad que salpica a políticos, al partido y a otras personas como Hidalgo, Barrabés…

Pedro Sánchez está en una huida hacia adelante. La realidad política demanda una brutal regeneración y recuperación institucional como queda en evidencia tras el enfrentamiento entre el Congreso y el Senado. La convocatoria de unas elecciones es la respuesta democrática a esta realidad. Pero para eso sería necesario tener un presidente democrático. Y ese no es Pedro Sánchez. Por ello, la moción de censura es una indiscutible solución transversal con el fin de convocar elecciones.

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D