Las víctimas de Pinochet destapan archivos secretos de la dictadura
Las quince carpetas repletas de archivos forman parte de la información recabada por la Comisión Nacional sobre Prisión Política y Tortura, conocida como Comisión Valech, el organismo creado en 2003 con el fin de esclarecer la identidad de las 40.000 personas que fueron detenidas y torturadas por razones políticas. Los documentos desclasificados constan de fotografías, recortes de prensa y fichas de las víctimas, además de la transcripción de sus testimonios, en los que aparecen los nombres y las descripciones de sus captores y torturadores. Hasta el momento, el acceso a esta valiosa información no sólo estaba vetado a la ciudadanía, sino también a los jueces, que no podían conocer los antecedentes sobre los casos de represión. La razón que esgrimía el Gobierno chileno es que debían proteger la dignidad de las víctimas, sin mostrar las torturas que sufrieron a los familiares. No obstante, ha sido ‘Descalcificación popular’, una iniciativa ciudadana, la que ha logrado que salgan a la luz estas informaciones.
Quince víctimas de la dictadura de Augusto Pinochet han logrado desclasificar los documentos que contenían testimonios y archivos relacionados con las torturas que sufrieron entre los años 1973 y 1990, cuando fueron detenidas por agentes de la dictadura militar. Se rompe así por primera vez el silencio impuesto por el Gobierno chileno, que decretó que los archivos debían mantenerse en secreto hasta 2054.
Las quince carpetas repletas de archivos forman parte de la información recabada por la Comisión Nacional sobre Prisión Política y Tortura, conocida como Comisión Valech, el organismo creado en 2003 con el fin de esclarecer la identidad de las 40.000 personas que fueron detenidas y torturadas por razones políticas. Los documentos desclasificados constan de fotografías, recortes de prensa y fichas de las víctimas, además de la transcripción de sus testimonios, en los que aparecen los nombres y las descripciones de sus captores y torturadores. Hasta el momento, el acceso a esta valiosa información no sólo estaba vetado a la ciudadanía, sino también a los jueces, que no podían conocer los antecedentes sobre los casos de represión. La razón que esgrimía el Gobierno chileno es que debían proteger la dignidad de las víctimas, sin mostrar las torturas que sufrieron a los familiares. No obstante, ha sido ‘Descalcificación popular’, una iniciativa ciudadana, la que ha logrado que salgan a la luz estas informaciones.