La ONU confirma que los desastres naturales son cada vez más intensos y mortales
Para llegar a estas conclusiones la ONU y CRED han analizado 20 años de datos relacionados con catástrofes naturales. En tan sólo las dos últimas décadas, un total de 7.056 desastres naturales han causado 1,35 millones de muertos. Los que más mortalidad han provocado son los terremotos y los tsunamis, y en la mayor parte de los casos, en un 90%, los desastres naturales han tenido lugar en países de medianos y bajos ingresos. Tal y como explica Guha-Sapir en declaraciones recogidas por la agencia EFE: “Si observamos las estadísticas en detalle veremos que el impacto de los desastres se concentra en áreas específicas de pobreza que, a su vez, reflejan las desigualdades del mundo”. Por otro lado, la experta señala que es probable que el número de víctimas sea mayor que el estimado por el estudio “porque mientras en Europa podemos contar cada muerto (por un desastre natural), en los países pobres no”. Robert Glasser, representante de la ONU para la reducción de desastres, ha sugerido la estrecha relación entre estos desastres y el cambio climático, declarando que estudios científicos han anticipado de forma empírica que en el futuro, los desastres relacionados con el cambio climático serán más extremos y frecuentes.
Un análisis conjunto de la ONU y del Centro de Investigación sobre la Epidemiología de los Desastres (CRED) señala que los desastres naturales que arrasan el planeta son ahora más intensos y mortales. Según la experta CRED, Debardati Guha-Sapir «el número de desastres no ha aumentado significativamente, pero cada suceso es más intenso y su impacto es mayor”. Los devastadores efectos del Huracán Matthew son un claro ejemplo de esta afirmación.
Para llegar a estas conclusiones la ONU y CRED han analizado 20 años de datos relacionados con catástrofes naturales. En tan sólo las dos últimas décadas, un total de 7.056 desastres naturales han causado 1,35 millones de muertos. Los que más mortalidad han provocado son los terremotos y los tsunamis, y en la mayor parte de los casos, en un 90%, los desastres naturales han tenido lugar en países de medianos y bajos ingresos. Tal y como explica Guha-Sapir en declaraciones recogidas por la agencia EFE: “Si observamos las estadísticas en detalle veremos que el impacto de los desastres se concentra en áreas específicas de pobreza que, a su vez, reflejan las desigualdades del mundo”. Por otro lado, la experta señala que es probable que el número de víctimas sea mayor que el estimado por el estudio “porque mientras en Europa podemos contar cada muerto (por un desastre natural), en los países pobres no”. Robert Glasser, representante de la ONU para la reducción de desastres, ha sugerido la estrecha relación entre estos desastres y el cambio climático, declarando que estudios científicos han anticipado de forma empírica que en el futuro, los desastres relacionados con el cambio climático serán más extremos y frecuentes.