Macron ataca el programa económico de Le Pen en el segundo debate electoral francés
El centrista Emmanuel Macron atacó el martes el proyecto económico de su principal rival en las elecciones presidenciales del 23 de abril, la ultraderechista Marine Le Pen, en un encendido debate televisivo en el que la acusó de provocar una «guerra económica» a tres semanas de los comicios más inciertos en la historia reciente de Francia.
El centrista Emmanuel Macron atacó el martes el proyecto económico de su principal rival en las elecciones presidenciales del 23 de abril, la ultraderechista Marine Le Pen, en un encendido debate televisivo en el que la acusó de provocar una «guerra económica» a tres semanas de los comicios más inciertos en la historia reciente de Francia.
Este segundo debate, que reunió en esta ocasión a los 11 candidatos a suceder al presidente François Hollande, adquiere un interés especial cuando todavía hay un tercio de votantes indecisos.
Prácticamente empatados en los sondeos de opinión con alrededor del 25% de intención de voto, Macron y Le Pen protagonizaron un áspero enfrentamiento sobre la salida del euro. La promesa de la dirigente del Frente Nacional de sacar a Francia de la moneda única si llega al poder, fue calificada por su principal rival, el ex miembro del partido socialista, de «guerra económica».
«Lo que usted propone señora Le Pen es una disminución del poder adquisitivo de los franceses, porque es lo que significaría la salida del euro para los ahorradores y los trabajadores», denunció Macron, el candidato presidencial francés que con más vehemencia defiende el proyecto europeo.
Para Marine Le Pen, el euro – que fue adoptado como moneda única de la Unión Europea en 2002 – supone todo lo contrario, asegurando que es responsable de la pérdida de poder adquisitivo, del déficit comercial y del aumento de los precios en Francia.
Además de «restablecer la moneda nacional», la candidata ultraderechista reiteró su voluntad de convocar un referéndum para preguntar al pueblo sobre la salida de Francia de la Unión Europea, siguiendo los pasos de Reino Unido que votó en 2016 a favor del Brexit.
«No quiero dejar que se instale una especie de falso debate entre aquellos y aquellas que protegen a los franceses diciendo ‘salgamos de la Unión Europea’ y los demás, que estarían a favor de dejar que las cosas sigan como están. Europa protege», afirmó Macron, ex ministro de Economía de Hollande.
Los Candidatos minoritarios alzan la voz
Por su parte, François Fillon, el candidato del partido conservador Los Republicanos, que según los sondeos ha caído al tercer puesto con el 17% en intención de voto, lastrado por un escándalo de los presuntos empleos ficticios por el que ha sido imputado por la justicia francesa, atacó la «ausencia» de un programa económico de Le Pen.
«Como todos sabemos, una gran mayoría de los franceses no quiere abandonar la moneda europea, esto significa que en realidad la señora Le Pen no tiene una política económica», criticó el ex primer ministro de Nicolas Sarkozy.
Las encuestas muestran que solo un tercio de los franceses está a favor de abandonar el euro. Muchos de ellos temen que esto suponga una devaluación de la nueva moneda nacional que afectaría a sus ahorros y aumentaría la inflación.
El líder de la izquierda radical, Jean-Luc Mélenchon, admirador de los gobiernos latinoamericanos de inspiración bolivariana, atacó en cambio al sector financiero que estimó «debe devolver el dinero» y «financiar un regreso al pleno empleo» en Francia, donde el paro ronda el 10%.
Mélenchon se ha disparado hasta el cuarto lugar en intención de voto (15%), superando al candidato del gobernante Partido Socialista, Benoît Hamon, que en las últimas semanas ha sido abandonado por importantes figuras de la formación política, entre ellos el ex primer ministro Manuel Valls.
Como se esperaba, los más beneficiados de este debate televisivo fueron los seis candidatos menos conocidos por los franceses, quienes aprovecharon esta ocasión para denunciar a los «políticos corruptos» y a un «sistema agotado».
«Quiero expresar la ira que viene de abajo (…) contra los políticos corruptos, algunos se reconocerán en esta sala», dijo Philippe Poutou, un candidato obrero, líder del Nuevo Partido Anticapitalista (NPA), en una clara alusión a Fillon y a Le Pen, ambos acusados por casos de corrupción.
El Frente Nacional es blanco de varias acusaciones de corrupción. Este mismo martes, la justicia abrió una investigación preliminar por un caso de empleos presuntamente ficticios en el grupo del consejo regional Nord-Pas-de-Calais, tres meses después de que se abriera otra investigación por sospechas similares contra eurodiputados del partido de la extrema derecha.