Un centenar de detenidos en una operación contra el Estado Islámico en Turquía

Las autoridades turcas han detenido este jueves a más de 100 supuestos miembros del grupo Estado Islámico (EI) en una redada en la capital, Ankara, ha informado la agencia de prensa estatal Anadolu, citada por AFP. Un total de 1.500 policías participan en esta operación después de que las autoridades emitieran órdenes de detención contra 245 personas sospechosas de vínculos con el Estado Islámico, de las cuales 111 han sido hasta ahora detenidas, ha precisado Anadolu.

Las fuerzas del orden han registrado 250 direcciones en Ankara y sus alrededores, ha añadido la agencia, según la cual también se han incautado de documentos ligados a la organización yihadista. Anadolu señala por otro lado que 27 personas, algunas de ellas sirias, han sido detenidas el jueves en otro operativo anti-EI en Bursa (localidad en el noroeste de Turquía).

Turquía ha sufrido en los dos últimos años mortíferos atentados atribuidos al Estado Islámico o reivindicados por la organización yihadista. El más reciente dejó 39 muertos en una conocida discoteca de Estambul en la noche de fin de año. El presunto autor de este ataque con fusil de asalto, Abdulkadir Masharipov, de nacionalidad uzbeka, fue encarcelado a mediados de enero. Su juicio debe iniciarse el 11 de diciembre.

Desde entonces, las autoridades han reforzado considerablemente las medidas de seguridad y arrestan regularmente a supuestos terroristas. Según una recopilación de datos publicada por el ministerio del Interior, unas 450 personas sospechosas de vínculos con el Estado Islámico fueron detenidas en el territorio turco durante el mes de octubre.

Las autoridades turcas fueron acusadas durante mucho tiempo de cerrar los ojos ante las actividades de los yihadistas en la frontera con Siria, pero desde hace dos años se multiplican las operaciones contra las células del EI en todo el país. También lanzaron una ofensiva transfronteriza en Siria entre agosto de 2016 y marzo de 2017 contra el Estado Islámico y las milicias kurdas que Ankara considera «terroristas». Esta ofensiva, bautizada «Escudo del Éufrates» permitió a los rebeldes sirios respaldados por Turquía retomar al EI varias ciudades, entre ellas Jarabulus, Al Rai, Dabiq y finalmente Al Bab. Turquía desplegó en octubre tropas de blindados en la provincia siria de Idlib, controlada en gran parte por yihadistas del antiguo brazo de Al Qaida en Siria, para instalar una «zona de distensión» en el marco de un acuerdo con Rusia e Irán.