Imputado por terrorismo uno de los principales sospechosos de los atentados del 13N
El sueco Osama Krayem, uno de los sospechosos clave en la investigación de los atentados del 13 de noviembre de 2015 en París, ha sido imputado este lunes por un magistrado antiterrorista francés, según han confirmado fuentes judiciales a Efe. Krayem, de 25 años y origen sirio, se encontraba detenido desde hace dos años en Bruselas y ha sido entregado hoy temporalmente a Francia para ser presentado ante un juez.
El sueco Osama Krayem, uno de los sospechosos clave en la investigación de los atentados del 13 de noviembre de 2015 en París, ha sido imputado este lunes por un magistrado antiterrorista francés, según han confirmado fuentes judiciales a Efe. Krayem, de 25 años y origen sirio, se encontraba detenido desde hace dos años en Bruselas y ha sido entregado hoy temporalmente a Francia para ser presentado ante un juez.
El sospechoso fue inculpado principalmente por complicidad en asesinato, tentativa de asesinato y secuestro en relación con una organización terrorista, así como por fabricación, posesión, transporte de explosivos y por adquisición y tenencia de armas en una banda organizada.
Se sospecha que Krayem estuvo presente en varios de los escondites utilizados por el comando terrorista en París, incluido el que se utilizó para confeccionar cinturones explosivos. En Bélgica, a Krayem se le conoce como el “segundo hombre del metro” de Bruselas, ya que se le situó allí cuando se cometió el ataque del 22 de marzo de 2016.
El presunto terrorista está implicado en la explosión en la estación de metro de Maelbeek, ubicada en pleno barrio europeo de la capital belga, que causó la muerte de una veintena de personas y 130 heridos. Krayem y Khalid El Bakraoui prepararon las cargas explosivas con las que este último perpetró el atentado suicida en Maelbeek. Krayem se arrepintió y volvió al piso franco para deshacerse de los explosivos, informa Efe.
Salah Abdeslam, el principal sospechoso de los atentados del 13N que causaron la muerte de 130 personas en París, fue condenado en abril a 20 años de cárcel por su participación en un tiroteo con policías en 2016 en la capital belga. Anteriormente, el hombre de nacionalidad francesa y origen marroquí fue detenido y tiroteado en marzo de 2016 en el barrio de Molenbeek en el marco de un operativo antiterrorista en esta zona.