La UE ha construido más de 1.000 kilómetros de muros para frenar la inmigración
Los Estados miembros de la Unión Europea y del Espacio Schengen han levantado más de 1.000 kilómetros de muros para frenar la inmigración desde la década de los 90. Así, lo ha revelado este miércoles el informe ‘Levantando Muros’, elaborado por el Centro Delàs de Estudios por la Paz.
Los Estados miembros de la Unión Europea y del Espacio Schengen han levantado más de 1.000 kilómetros de muros para frenar la inmigración desde la década de los 90. Así lo ha revelado este miércoles el informe ‘Levantando Muros’, elaborado por el Centro Delàs de Estudios por la Paz, vinculado a los jesuitas, y copublicado con el Transnational Institute (TNI) y Stop Wapenhandel.
La investigación señala el auge de la extrema derecha en Europa como principal causante de los refuerzos en las fronteras. «La extrema derecha ha manipulado a la opinión pública para crear temor y recelo irracionales hacia las personas refugiadas. Esta xenofobia establece muros mentales en las personas, que más tarde exigen muros físicos», explica el informe en una de sus páginas.
Las conclusiones del estudio destacan la apuesta de la UE por la seguridad frente a la libre circulación y el derecho de asilo. «Los países de la Unión Europea están gestionando los flujos migratorios y los movimientos de personas desplazadas forzosamente mediante el levantamiento de muros, el cierre de fronteras, la vigilancia, la seguritización y la suspensión de la libre circulación de las personas», expone.
El informe también señala entre sus páginas que «en lugar de priorizar métodos humanitarios en la gestión de los flujos migratorios y de tratar los problemas estructurales de violencia global y desigualdad económica, los países de la UE han optado por levantar muros sociales, políticos y físicos argumentando que así protegen el territorio europeo de la inseguridad y el terror».
De acuerdo a los autores, la existencia de estos más de 1.000 kilómetros de muros, equivalente a seis veces el muro de Berlín, supondrán «un futuro inhumano y desolador que solo sirve a intereses económicos y políticos de una minoría».
Asimismo, el informe llama a la movilización para cambiar las políticas migratorias y derribar los muros. «Cabe recordar que hace poco más de 30 años, el Muro de Berlín parecía igual de inamovible e infranqueable. A pesar de eso, un movimiento popular de masas afloró de la nada, y consiguió que el muro cayese y con él se terminaran las décadas de gobierno comunista. Es ahora el momento en que se necesita un movimiento similar para derribar los muros de esta era«.