La izquierda sí se pone de acuerdo en Dinamarca para formar un gobierno socialdemócrata
Mette Frederiksen se convertirá en la primera ministra más joven del país tras alcanzar un acuerdo de gobierno con otras dos formaciones
Tres semanas de negociaciones después, la líder de los socialdemócratas daneses, Mette Frederiksen, ha anunciado el acuerdo alcanzado con tres partidos de izquierda para formar gobierno tras las elecciones legislativas que se celebraron 5 de junio. «Hemos conseguido el objetivo, ha comunicado de madrugada Frederiksen, quien formará un gobierno en minoría –algo habitual en el país– con apoyo de sus aliados. «Hemos demostrado que, cuando los daneses votan como lo hicieron, una nueva mayoría puede traducir sus esperanzas en acciones«.
Los socialdemócratas ganaron las elecciones legislativas del 5 de junio, poniendo fin al gobierno de minoría del primer ministro liberal Lars Lokke Rasmussen, después de que varios de sus aliados claves sufrieran importantes pérdidas en las urnas. Las negociaciones recién concluidas han sido las más largas desde 1988, se trata de un país acostumbrado al consenso político.
Frederiksen, a la que la reina de Dinamarca encargó iniciar las conversaciones para formar gobierno, presentará este mismo miércoles el acuerdo, fundamentado en 18 páginas. Los analistas creen que el gobierno será presentado el jueves. «Es un documento político, uno de los primeros del mundo que define realmente unas ambiciones verdes. Vamos a elaborar un plan climático, una ley vinculante sobre el clima, y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 70%», ha prometido la jefa de filas de los socialdemócratas.
Su partido quedó en primer lugar en los comicios con un 25,9% de los sufragios, y el conjunto del bloque rojo cuenta con una mayoría absoluta de 91 de los 179 escaños que componen el Folketing –el Parlamento danés–. El futuro gobierno prevé llevar a cabo una estricta política migratoria, como ya ocurre desde 2001, pero «humana». Dinamarca volverá a aceptar a los refugiados procedentes del programa de cuotas de reinstalación de Naciones Unidas, del que suspendió su participación en 2016.
El acuerdo también prevé el abandono del proyecto de trasladar a una isla inhabitada a los migrantes «indeseables», los refugiados rechazados con antecedentes penales a la espera de expulsión y aquellos que no pueden ser devueltos a sus países.
Mette Frederiksen, de 41 años y quien se convertirá en la primera ministra más joven del país, «cumplió su deseo de dirigir un gobierno totalmente socialdemócrata», ha titulado el periódico Berlingske. La prensa del país señala también la casi ausencia de una financiación precisa de la futura política gubernamental.