Sánchez da por rotas las negociaciones con Podemos y acusa a Iglesias de promover una "consulta trucada"
Sánchez ha confirmado que la semana pasada ofreció a Iglesias ministerios para «personas cualificadas del ámbito de Podemos»
El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha dado este lunes por rotas las negociaciones con Unidas Podemos, lo que deja en el aire su elección como jefe del Ejecutivo la próxima semana en el Congreso. El líder socialista ha cargado con dureza contra Pablo Iglesias, a quien ha acusado de «romper unilateralmente» las negociaciones para su investidura al haber promovido una «consulta trucada» a los inscritos de su partido para decidir sobre la conformación de un gobierno de coalición o cooperación.
Así lo ha afirmado Sánchez en una entrevista en Cadena Ser, en la ha calificado de «mascarada» la estrategia de Iglesias para «justificar su no por segunda vez» a su investidura después de que Sánchez ofreciera a Iglesias la incorporación de ministros técnicos de Podemos al Gobierno. Una oferta que ya no se mantiene en pie.
Sánchez ha confirmado que la semana pasada ofreció a Iglesias ministerios para «personas cualificadas del ámbito de Podemos», y recalcó que es la primera vez que se hace una oferta así en la historia de la democracia a un partido que, además, ha sido el cuarto en las elecciones.
La consulta de Iglesias a la militancia es una ruptura unilateral de la negociación, un cierre absoluto de puertas. Se trata de una mascarada bien grande para justificar su no a un gobierno de izquierdas por segunda vez. Ya lo hizo en 2016, y ahora también. #PedroSánchezEnlaSER pic.twitter.com/AH6NHMUXcK
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) July 15, 2019
Sin embargo, las negociaciones no han fructificado ante la insistencia de Iglesias de que haya un gobierno de coalición con los socialistas, en el que hipotéticamente estaría él mismo, algo que rechaza Sánchez, al considerar que España necesita un ejecutivo «con cohesión interna» y con Unidas Podemos existen «discrepancias» sobre temas de Estado como la crisis política de Cataluña.
El líder socialista da por hecho que Unidas Podemos votará «no» a su investidura como jefe del Gobierno la próxima semana, lo mismo que ocurrió en 2016, por lo que ha acusado a ese partido de favorecer entonces la continuidad de un gobierno conservador, liderado por Mariano Rajoy. Ha pedido por ello al resto de partidos que asuman su «responsabilidad», especialmente a PP y Ciudadanos, para que no haya un «bloqueo».
La situación actual muestra de nuevo la desconfianza que existe entre Sánchez e Iglesias, lo que dificulta un entendimiento entre la izquierda para gobernar.
Sánchez ha hecho un llamamiento a la responsabilidad, ya que no hay «segundas partes». Si la próxima semana el Congreso rechaza su candidatura, expira el encargo que le hizo el rey de formar gobierno, por lo que el monarca tendría que iniciar de nuevo una ronda de consultas con los partidos para ver el apoyo que darían a un candidato. En este nuevo escenario, las fuerzas políticas «tendrían que hacer movimientos», afirma Sánchez.