El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha ingresado en el hospital militar de Walter Reed, en las afueras de Washington, para recibir tratamiento contra el coronavirus[contexto id=»460724″].
Por qué es importante: Donald Trump se encuentra en plena campaña electoral para las presidenciales del 3 de noviembre, por lo que a casi un mes de los comicios, el mandatario tuvo que suspender todas sus actividades de cara a la reelección, una carrera en la que su rival demócrata, Joe Biden, le lleva la ventaja.
El traslado fue descrito por la Casa Blanca como una medida de precaución ya que, con 74 años y más de 100 kilos, es considerado población de riesgo ante la COVID-19: «Tras la recomendación de su hospital y de los expertos, el presidente va a trabajar desde las oficinas presidenciales» del hospital militar de Walter Reed «durante los próximos días», ha informado la portavoz Kayleigh McEnany.
El médico de la Casa Blanca, Sean Conley, ha indicado que el 45° presidente de Estados Unidos, con «fatiga» y de «buen ánimo», recibió una dosis del cóctel de anticuerpos Regeneron, un tratamiento intravenoso que se encuentra en etapa de ensayos clínicos y no obtuvo aún luz verde de los reguladores.
Trump abandonaba la Casa Blanca caminando y vestido con traje y corbata y portando una mascarilla negra de tela. Sin detenerse ha hablar con la prensa, sostuvo el pulgar hacia arriba mientras caminaba y luego hizo el saludo militar antes de subir al helicóptero a las 18:20 hora local (22:30 GMT).
Tras un vuelo de 15 minutos y un corto trayecto en limusina, Trump llegó al hospital militar ubicado en Bethesda, en Maryland, a las afueras de Washington. «Voy al Hospital Walter Reed. Creo que estoy muy bien. Pero vamos a asegurarnos de que todo salga bien», ha escrito en un mensaje publicado en su cuenta de Twitter mientras salía de la Casa Blanca.
El mandatario de 74 años anunció en la madrugada que él y su mujer Melania dieron positivo para la Covid-19 y anunció que iniciarían una cuarentena.