La AVT sostiene que esa estrategia de utilizar «supuestos arrepentimientos de formulario» esconde lo que no es más que «una cesión a una reivindicación histórica de ETA» y pone en duda la «empatía» que algunos de los presos ha mostrado con las víctimas
La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, dependiente del Ministerio del Interior, ha acordado el traslado de otros seis presos etarras a cárceles más próximas al País Vasco, en concreto a las de Pamplona, El Dueso (Cantabria), Soria y Palencia.
Entre los acercamientos figuran, el Jesús María Altabe, preso desde 1999 y condenado a 30 años por el asesinato del guardia civil Luis Ollo Ochoa en 1984 y que será trasladado de Castellón a Soria y Ángel María Tellería Uriarte, arrestado en 2017 en México, donde llevaba décadas residiendo, por el asesinato a tiros de la inspectora de policía María Josefa García en unos apartamentos de Zarauz (Guipúzcoa), en junio de 1981.
Tellería Uriarte, actualmente en Estremera (Madrid), será trasladado a El Dueso, en Cantabria, para cumplir el resto de los 30 años de pena de prisión. Lo hará en régimen de segundo grado.
También irá a El Dueso Jon Crespo Ortega, en prisión desde 2002 por una condena de 25 años de cárcel por los delitos de colaboración con banda armada, daños, lesiones, desórdenes públicos y tenencia de explosivos. Será trasladado desde Murcia y cumplirá las tres cuartas partes de la condena el próximo agosto.
Otro acercamiento es el de José Carlos Apeztegia Jaca, quien, tras cumplir condena y quedar en libertad hace siete años por intentar asesinar en 1992 al industrial vasco José Osinalde, cumple desde 2018 pena de cuatro años por proponer a la dirección de ETA atentar con un coche bomba en la sede en Madrid del sindicato de funcionarios de prisiones ACAIP.
Apeztegia será traslado de Ocaña I (Toledo) a Pamplona donde cumplirá en octubre de 2021 las tres cuartas partes de condena en segundo grado, a propuesta de la prisión toledana.
Desde la cárcel de Castellón II al Dueso (Cantabria) será conducido Jon Etxeberria Oiarbide. Ingresó en prisión el 13 de diciembre de 2017 y cumple una condena de nueve años por depósito de armas.
En concreto, fue miembro liberado de ETA y fue condenado por trasladar armas y explosivos de Francia a Portugal en una furgoneta que fue interceptada en Zamora en 2010 para el entonces jefe de la banda Mikel Kabikoitz Carrera Sarobe, Ata.
El sexto acercamiento aprobado por Instituciones Penitenciarias es el de Juan María San Pedro Blanco, perteneciente al comando Matalaz (de apoyo al comando Vizcaya) y condenado en 1995 por el atentado con un artefacto explosivo en el coche de un policía en Barakaldo (Vizcaya) la noche del 6 de junio de 1991.
Prisiones ha acordado su traslado desde Herrera de la Mancha, en Ciudad Real, donde cumplió en 2018 las tres cuartas partes de condena a Dueñas-La Moraleja, en Palencia.
La AVT ha denunciado un viernes más estos traslados y ha asegurado haber tenido conocimiento de una estrategia dirigida por abogados de los presos de ETA para que firmen cartas «de falso arrepentimiento» para facilitar su acercamiento a cárceles próximas al País Vasco.
