La Policía del Capitolio de Estados Unidos ha alertado este miércoles del plan de una milicia para irrumpir este jueves en la sede del Congreso de Estados Unidos, en Washington DC.
En contexto: este cuerpo policial ha indicado en un comunicado que había obtenido información de Inteligencia que «muestra un posible complot de una milicia identificada para irrumpir el jueves, 4 de marzo, en el Capitolio». Sería la segunda vez tras los sucesos del 6 de enero, es decir, casi dos meses después del asalto mortal por parte de simpatizantes del expresidente Donald Trump[contexto id=»381723″].
«Ya hemos hecho actualizaciones de seguridad significativas que incluyen el establecimiento de una estructura física y un aumento del personal para garantizar la protección del Congreso, del público y de nuestros agentes de Policía», dice la nota.
La Policía del Capitolio ha agregado que se toma esa información de Inteligencia muy seriamente y colabora con sus socios a nivel local, estatal y federal para detener cualquier amenaza contra la sede del Congreso del país. Y ha subrayado que, debido la «naturaleza delicada» de los datos de los de que dispone, no puede ofrecer más detalles por el momento.
Según la cadena de televisión CNN, información proporcionada por el FBI y el Departamento de Seguridad Nacional advierte que ha aumentado la discusión entre grupos extremistas, como la organización de ultraderecha Three Percenters, sobre un posible plan de atacar el Capitolio este 4 de marzo.
Los seguidores del movimiento conspiratorio QAnon creen que el 4 de marzo el expresidente de EE.UU. Donald Trump será investido de nuevo, basándose en que entre 1793 y en 1933 la investidura de los mandatarios cayó a menudo en torno a esa fecha. Precisamente, cientos de seguidores de QAnon, miembros de grupos de ultraderecha y partidarios de Trump asaltaron el pasado 6 de enero el Capitolio, cuando se celebraba una sesión conjunta de las dos Cámaras del Congreso para ratificar la victoria del demócrata Joe Biden en las elecciones presidenciales de noviembre. Debido a ese ataque, Trump fue sometido a su segundo juicio político en el Senado, del que fue absuelto el pasado 13 de febrero, después de haber abandonado la Casa Blanca.
En los últimos días, el Congreso ha acogido una serie de sesiones en las que responsables de seguridad han ofrecido su versión de los hechos ocurridos el 6 de enero, en los que murieron cinco personas. La semana pasada, la jefa en funciones de la Policía del Capitolio, Yogananda Pittman, advirtió en una de esas audiencias de un posible plan de extremistas para volar la sede del Congreso cuando Biden pronuncie su primer discurso ante las dos Cámaras legislativas. «Sabemos que miembros de milicias que estuvieron presentes el 6 de enero han manifestado sus deseos de que quieren volar el Capitolio y matar al máximo de miembros (del Congreso) que sea posible, con un nexo con el (discurso del) Estado de la Unión, sobre el que sabemos que aún no se ha fijado una fecha», dijo Pittman.
De acuerdo a medios estadounidenses, se espera que Biden pronuncie su discurso, similar al del Estado de la Unión (como todavía no ha cumplido un año en el poder será más para explicar sus planes de Gobierno y sus logros de sus primeras semanas), en una sesión conjunta del Congreso, después de que el Legislativo apruebe un tercer rescate económico por la pandemia.