Julen Madariaga Agirre, uno de los fundadores de ETA en 1959, ha fallecido a los 88 años después de una larga enfermedad. Así lo ha comunicado el portal Naiz.
En contexto: Madariaga Agirre nació en Bilbao el 11 de octubre de 1932, pero su familia tuvo que emigrar a Chile como consecuencia de la Guerra Civil (en aquella época su padre era militante del PNV) y regresaron a Bilbao cuando Madariaga tenía 10 años. Fue abogado y doctor por Cambridge, y junto a Txillardegi y Benito del Valle se convirtió en uno de los fundadores de ETA; estuvo encausado en el proceso de Burgos y fue declarado en rebeldía. Asimismo, fue un miembro destacado de Herri Batasuna, si bien en los años 90 rechazó el uso de la violencia, se apartó de esa formación, fundó Aralar, y fue miembro de la organización pacifista Elkarri.
En 2014 Madariaga escribió su autobiografía, donde aseguró que había sentido la necesidad de reunir, «antes de morir», sus memorias de militante histórico en la organización terrorista, y también las de su disidencia, que culminó con su alejamiento definitivo de los postulados de la banda.
En los últimos años, Madariaga vivía alejado de cualquier actividad pública y residía en la localidad de Senpere, en el País Vasco francés.