Cataluña utiliza el chantaje emocional para ocultar su discriminación a Guardia Civil y Policía en la vacunación
El TSJC ha ordenado a la Generalidad que la Guardia Civil y la Policía Nacional alcancen en diez días el mismo porcentaje de vacunación que los Mossos
El Govern dice ahora que tendrá que retrasar la inmunización a la población de 70 años por tener que vacunar a los agentes de seguridad
El secretario de Salud Pública de la Generalidad, Josep Maria Argimon, ve «ridículo» el criterio del TSJC sobre la vacunación de agentes de la Guardia Civil y la Policía Nacional, y ha afirmado: «Cumpliremos, pero para ello retrasaremos vacunación de gente de 70 años, ahí lo dejo», ha subrayado.
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha ordenado a la Generalitat que «sin excusa alguna» garantice «de inmediato y sin dilaciones» la vacunación a los agentes de la Guardia Civil y la Policía Nacional en Cataluña, para que en diez días alcance la misma proporción que los Mossos.
En la rueda de prensa semanal sobre el estado de la vacunación en Cataluña, Argimon ha criticado esta decisión judicial, si bien ha asegurado que la van a acatar.
Argimon ha recordado que en estos momentos están inmunizando por franjas de edad, así que si ahora Salud se dedica «a vacunar a personal esencial, sea guardia civil, bombero, mosso o maestro, dejará de vacunar a los de más de 60 o 70 años, sean guardias civiles o no».
No obstante, el responsable de Salud parece obviar que sí se consideró a los Mossos d’Esquadra como personal esencial y se les vacunó como a tales. De hecho, entre el 70% y el 80% de los agentes del cuerpo autonómico están inmunizados, por el 15% de los de la Guardia Civil y el CNP.
El Govern se escuda en la suspensión de AstraZeneca
En un momento en el que en España ya no se administra AstraZeneca -la usada para agentes y otros profesionales esenciales- a menores de 60 años y que aún no se ha determinado cómo proceder en las segundas dosis en los jóvenes vacunados con el suero de Oxford, Argimon se ha preguntado retóricamente qué inmunógeno se tiene que administrar a los policías del Estado.
Y ha enfatizado que, si no se hubiera frenado la inmunización con AstraZeneca en todos los colectivos esenciales, ahora todos -los agentes de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado- estarían vacunados».
No obstante, el problema no estriba en que en este momento ya no se esté vacunando con AstraZeneca, sino en el hecho de que, cuando este antídoto sí estaba disponible, la Generalidad optase por administrarlo en mucha menor proporción a guardias civiles y policías que a los mossos.
La mala fe de la Generalidad se evidencia en el mensaje que ha escrito en su cuenta de Twitter el expresidente catalán Carles Puigdemont, que ha criticado que los agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil destinados en Cataluña se vayan a vacunar antes que «las personas indefensas y pacíficas a las que golpearon de forma salvaje el 1-O».
Puigdemont ha dicho que los policías «continúan privilegiados y protegidos por el sistema español» y se ha referido a los agentes como «los que agredieron a ciudadanos al grito de ‘¡a por ellos!'».