La embajadora marroquí en España, Karima Benyaich, ha criticado «las recientes declaraciones a la prensa y ante el parlamento» de la ministra española de Exteriores, Arancha González Laya, que según ella «ponen en cuestión el respeto mutuo y la confianza a las que hizo referencia el presidente del Gobierno español», Pedro Sánchez.
En contexto: España y Marruecos viven una crisis ocasionada por la hospitalización en España del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, y la entrada la pasada semana de unos 8.000 inmigrantes irregulares en la ciudad española de Ceuta ante la pasividad de la policía de Marruecos en la frontera.
La embajadora, llamada a consultas a Rabat por su gobierno la pasada semana, ha leído esta declaración ante los medios desde la sede del ministerio de Exteriores en la capital marroquí, donde fueron llamados los medios de comunicación con carácter de urgencia. Benyaich ha aclarado que las declaraciones de González Laya a las que hacía referencia no son unas en concreto, sino «varias a lo largo de estos días», y ha considerado que en ellas «presenta hechos erróneos y utiliza palabras inapropiadas».
La embajadora se ha preguntado si esas declaraciones «son una torpeza personal de la ministra o si reflejan las veleidades de ciertos medios en España contrarios a la integridad territorial del reino (en referencia al Sáhara Occidental), causa sagrada del pueblo y las fuerzas vivas de la nación». «La crisis actual -ha continuado Benyaich- ha desvelado las segundas intenciones y los objetivos de ciertos medios en España que siguen perjudicando los intereses superiores de Marruecos desde la recuperación del Sáhara marroquí en 1975», en referencia a la Marcha Verde, ha sostenido Benyaich.
La embajadora ha concluido diciendo que por estas palabras de la ministra, «Marruecos toma nota y actuará en consecuencia», sin entrar en detalles. La ministra española de Asuntos Exteriores ha invocado a la «discreción» para no precisar qué contactos se han podido mantener con autoridades de Marruecos para resolver la crisis entre ambos países. En una rueda de prensa, González Laya ha asegurado que Ghali «saldrá de España cuando esté fuera de peligro y haya acabado la razón por la cual está en nuestro país, una situación médica de orden crítico».
Además, ha subrayado que el Gobierno español es consciente del «rechazo» que la decisión sobre Ghali ha causado en Marruecos y está «plenamente abierto al diálogo y a mirar al futuro» ya que siempre ha creído que «Marruecos es un país socio y amigo de España y así queremos que siga siendo» y que ambos países se benefician de mantener una buena relación y del progreso mutuo.