El «bluf Jalloul» hace peligrar el control de Sánchez en el PSOE de Madrid
Según ha podido saber THE OBJECTIVE, «Hana Jalloul renunció a presentarse a las primarias tras constatar sus limitaciones políticas».
Fue la gran apuesta de Pedro Sánchez para las últimas elecciones en Madrid. La número dos de la fallida candidatura de Ángel Gabilondo, responsable de la ponencia política del PSOE para el 40º Congreso y actual portavoz de la Asamblea de Madrid, la carrera política de Hana Jalloul se estrelló antes de empezar. Su «falta absoluta de conocimiento político y funcionamiento interno del PSOE» le granjeó el apodo jocoso de ‘Kamala Harris madrileña’, una irónico y demoledor retrato de quien «estuvo en mente de Pedro Sánchez para ser el golpe de efecto» en la candidatura de Madrid contra Ayuso si no se hubieran adelantado elecciones.
Su escasa talla política y su limitada capacidad de comunicación es ya de dominio público en el PSOE-M y en los círculos de poder entre Moncloa y Ferraz. Según relatan fuentes socialistas a THE OBJECTIVE, la certeza de sus limitaciones llega hasta la protagonista quien «sufre tanto sus carencias que las verbaliza a su entorno más cercano». Es una «mujer inteligente, formada, habla cuatro idiomas, es doctora y experta en terrorismo internacional, eso no está en duda. Pero no tiene ni idea de política. Tan es así que muchos esperaron de ella la candidatura a liderar el PSOE-M para rodarse y adquirir experiencia hasta los próximos comicios. Pero no lo hizo. «Hana no quiso presentarse. Se vino abajo y decidió dar un paso atrás al comprobar que le venía grande el puesto».
Pese a todo, no desapareció de la mente del líder del PSOE, Pedro Sánchez, quien la incluyó en su nueva Ejecutiva Federal como secretaria ejecutiva de Política Internacional y Desarrollo. También fue una de las más promocionadas en el 40º Congreso del PSOE en Valencia, la primera que ofrecían desde la organización para entrevistas televisivas y ocupar el foco mediático.
Las fuentes socialistas consultadas admiten que «Hana ha sido un bluf, el ‘bluf Jalloul’», lo llaman algunos, y pese a ello sigue situándose en las quinielas para la candidatura del PSOE en Madrid para 2023. «Tiene dos años para aprender y mejorar; si no lo hace, tiene otros aspirantes». Concretamente, dos: Llanos castellanos, ex directora adjunta de gabinete en Moncloa hasta julio, cuya precipitada salida se debió a sus enfrentamientos con Óscar López, según adelantó THE OBJECTIVE; y Juan Lobato, el portavoz adjunto del PSOE en la Asamblea de Madrid que aspira a ganar las primarias para la secretaría general del PSOE este sábado.
«Lobato lo quiere todo. Ser secretario general y ser candidato», explican las fuentes socialistas consultadas, «pero no le van a dejar porque Pedro quiere colocar a una mujer frente a Ayuso y ofrecer un doble tíquet femenino». De momento, se trata sólo de una aspiración y aún queda tiempo para la decisión del presidente del Gobierno pero otras fuentes cercanas al presidente advierten de que «si el secretario general del PSOE quiere presentarse no se lo pueden impedir».
La batalla Lobato-Ayala
En cualquiera de los casos, no habrá batalla si Lobato no pasa este fin de semana su primera prueba de fuego con una victoria en las primarias. Tiene a su favor al aparato: «Lobato es el candidato de Pedro», aunque todos admiten que es un candidato de perfil bajo que tendría a su favor hacerse con la portavocía del grupo socialista en la Asamblea de forma automática, lo cual forzaría el desalojo de Hana Jaloul que permanecería como diputada rasa.
Sin embargo, hay un tercer personaje en liza que pone en peligro la victoria de Lobato y el control del convulso PSOE madrileño por parte de Pedro Sánchez: Javier Ayala, el alcalde de Fuenlabrada, quien ha protagonizado en las últimas semanas el rumor creciente en torno a una «sorpresa» en las primarias. Desde Ferraz admiten que «hay que pelear» porque «hay partido», aunque en el núcleo duro del presidente aseguran que Lobato se hará con el 60% de los apoyos al contar con una amplia mayoría de agrupaciones a su favor: Chamberí, Chamartín, Latina (los más grandes), Alcalá de Henares, Parla, Pinto, Móstoles, Navalcarnero, Alcobendas, San Pedro del Pinatar, San Sebastian de los Reyes, Coslada y San Fernando.
Y atribuyen a Ayala el distrito de Centro, que concentra un movimiento mayoritario ‘anti aparato’. En la candidatura de Ayala lo desmienten. Según confirman desde su entorno a THE OBJECTIVE, «los municipios grandes están con él. Todo el cinturón rojo está con Ayala –Fuenlabrada, Alcorcón, Getafe-, y un gran número de agrupaciones del corredor del Henares como Alcalá de Henares». Definen a Lobato como «el candidato de derechas, un tibio y un híbrido» en el plano ideológico y denuncian «presiones de la dirección» en la recogida de avales.
La incógnita se despejará este sábado por la noche una vez que se hayan cerrado las urnas en una votación que se prolongará desde las 8:00 a las 21:00 horas. Desde la candidatura alternativa de Ayala aseguran que «es el nuevo Pedro Sánchez y que va a pasar lo mismo que con Susana Díaz, que ella ganó en avales por tener al aparato y finalmente Pedro se alzó con la victoria inesperada porque tenía el respaldo de la militancia». Pero en la dirección socialista no ven «ninguna posibilidad» porque «no hay tensión electoral» y porque «la movilización va a ser baja. No hay espíritu de primarias».