Sánchez enfurece al PSOE de Madrid por «la cacicada» de imponer a Mercedes González
El presidente encarga al nuevo líder madrileño, Juan Lobato, blindar a quien será su candidata en Madrid poniendo obstáculos a la presentación de candidaturas alternativas
«Está la gente que trina», explican desde el PSOE de Madrid a THE OBJECTIVE ante los primeros movimientos acordados por la recién elegida Ejecutiva regional del proclamado líder socialista, Juan Lobato. El candidato apoyado por Ferraz acata las directrices de Pedro Sánchez de «acelerar el proceso de designación» de candidaturas en Madrid para construir un proyecto alternativo al PP de José Luis Martínez-Almeida e Isabel Díaz Ayuso. El primer paso se tomó en la primera reunión de la Ejecutiva celebrada el lunes 15 de noviembre al abrir las bases para la presentación de las candidaturas a la nueva Agrupación Socialista de Gran Ciudad de Madrid.
Un proceso para el que la nueva dirección regional apenas ha concedido 24 horas para la presentación de candidaturas, con el objetivo de «obstaculizar» a los posibles rivales de la candidata de Pedro Sánchez, Mercedes González. La actual delegada del Gobierno en Madrid lleva en la mente del presidente y secretario general del PSOE desde su designación en dicho cargo, según explican fuentes socialistas: «Para algo la puso como delegada del Gobierno». Y ha llegado el momento de hacerlo oficial para iniciar su precandidatura contra Almeida.
Un procedimiento «insólito, que nunca ha ocurrido» y que se suma al cambio en los estatutos del PSOE que eleva del 3% al 12% el porcentaje de avales mínimo exigido para formalizar la candidatura. Según se recoge en las bases de la convocatoria, en el caso de que se presenten candidatos alternativos estos tendrían que recabar avales del 18 al 24 de noviembre. Los aspirantes deberían lograr «un mínimo de un 12% y un máximo del 15%» de avales frente al 3% que se fijaba en la anterior modificación a los Estatutos del PSOE que se produjo en el 40º Congreso Federal del PSOE en Valencia.
Pero esta futurible contienda no se va a producir. «¿Quién se va a presentar sabiendo que Mercedes González es la candidata de Pedro Sánchez? Es una cacicada. No es ético. No se va a presentar nadie. Ya te están diciendo quién va a ser la ganadora», denuncian las fuentes socialistas consultadas por este periódico, que se hacen la siguiente pregunta: «¿Por qué no la designan directamente como hicieron con Gabilondo? Que no lo encubran al menos de democracia interna».
«Lobato está intervenido»
Desde el PSOE de Madrid aseguran que el malestar del partido engloba a las 22 agrupaciones de la federación socialista madrileña, no solo con la dirección federal de Pedro Sánchez sino también con la regional de Juan Lobato, elegida recientemente este pasado fin de semana, porque demuestra que «Lobato está intervenido, se lo han cargado… está tutelado por Ferraz».
El cabreo con el recién llegado secretario general madrileño radica además en que «llueve sobre mojado» ante la «falta de neutralidad» que ha demostrado al incorporar en su Ejecutiva a siete de los miembros de la comisión gestora que se constituyó en el PSOE madrileño tras la dimisión de José Manuel Franco y Ángel Gabilondo después de la debacle socialista del 4-M. Un órgano que debería aparentar imparcialidad y que sido «arte y parte» al incorporar a la presidenta de la gestora, Isaura Leal y otros seis miembros no menores como Fran Martín, el secretario general de Presidencia del Gobierno, Diego Cruz, Lorena Morales, Carmen Mena y Fernando Fernández.
La incógnita de la rival de Ayuso
Se trata de algo que consideran la prueba de que «Lobato no será candidato» y será el presidente quien elegirá a su candidata a la Comunidad de Madrid, en femenino, cuando lo considere oportuno. Hasta hace pocas semanas, en el puesto de rival de Isabel Diaz Ayuso se ubicaba a Hana Jalloul o Llanos Castellanos, pero la primera «ha caído en desgracia» y la segunda «tiene demasiadas aspiraciones». La duda a nivel autonómico aún continuará, pero la incógnita en el plano local ya se ha despejado abiertamente. Y el perfil no despierta especial emoción entre la militancia del PSOE madrileño. «Primero es la delegada del Gobierno, lo cual incurre en una clara incompatibilidad» si no legal sí desde el punto de vista «ético» al utilizar la estructura gubernamental para iniciar su campaña electoral a dos años vista; y segundo, por tratarse de alguien que «apoyó el fichaje estrella de Pepu Hernández», anterior candidato al Ayuntamiento de Madrid y apuesta personal de Pedro Sánchez, «que fue su coordinadora y que siempre ha ocupado puestos de confianza» pero «no se ha trabajado su agrupación».