Las residencias exigen aplicar el IVA superreducido a todos los servicios a mayores dependientes
Denuncian que la duplicidad en los tipos impositivos penaliza a muchos ancianos, que llegan a pagar 1.600 euros más al año por las mismas prestaciones
Mismo servicio, distinto desembolso. El Círculo Empresarial de Atención a Personas (CEAPs) reclama al Gobierno que todos los servicios a la dependencia para mayores tributen al 4%, el tipo más bajo del IVA, y que acabe así con la duplicidad que penaliza a aquellos ancianos que necesitan cuidados. El porcentaje de IVA que se paga actualmente por los trabajos asociados a la dependencia es del 10% si alguien los contrata por sí mismo, mientras que idénticos servicios tributan al 4% si son públicos o concertados. Una diferencia, alerta la patronal de las residencias, que puede suponer unos 1.600 euros de diferencia al año.
En España existen tres tipos de IVA. El general, que tributa un 21% del precio del producto o del servicio; el reducido, un 10%; y el superreducido, que lo hace solo al 4%. En el primer caso, el general, están incluidos la mayoría de artículos. Es el porcentaje que se aplica por defecto. Afecta a electrodomésticos, ropa, calzado y tabaco. El IVA reducido grava algunos alimentos, vivienda, transporte de viajeros, plantas y material sanitario. El último escalón, el del IVA superreducido, se aplica a los productos considerados de primerísima necesidad, una consideración que reciben la leche, los huevos, las verduras o las hortalizas, así como libros y periódicos.
«Una injusticia histórica»
En la CEAPs consideran que todos los servicios asociados a la dependencia deben ser considerados de primera necesidad: tanto las residencias como la ayuda a domicilio, la teleasistencia o los centros de día. Todos ellos tributan al 10% si los contrata una persona concreta, seis puntos más que si el beneficiario está subvencionado. «Una injusticia histórica», clama el sector. CEAPs, integrado por patronales de atención de toda España y por empresas de ámbito nacional como Tunstall, Televida, Vitalia y Macrosad, es la mayor asociación de este tipo en nuestro país, con más de 180.000 plazas residenciales y 300.000 de teleasistencia.
«El Gobierno da la espalda a las personas mayores y dependientes», se queja Cinta Pascual, presidenta de CEAPs. Está decepcionada con las circunstancias impositivas que rodean a su sector. Advierte de que seguirán unidos «luchando para que el Gobierno recapacite». Según sus datos, hasta agosto murieron 130.661 solicitantes de ayuda a la dependencia. Lo hicieron en un limbo normativo que les impidió beneficiarse de esas ayudas. CEAPs indica que 90.491 eran beneficiarios del Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD) y que otros 17.733 estaban pendientes de resolución, por lo que en muchos casos tuvieron que contratar los servicios de forma privada. Y lo hicieron pagando un 6% más de IVA del que les correspondía.
CEAPs denuncia que los mayores españoles pasan una media de 438 días esperando. «La ley determina que hay que recibir la prestación o el servicio en un plazo máximo de 180 días», explica Pascual. La presidenta de la patronal de las residencias sostiene que la diferencia entre pagar un tipo de IVA u otro puede acarrear hasta 120 euros más de desembolso al mes en el caso de que el centro cueste 2.000 euros. En ese escenario, el beneficiario de servicios públicos paga 80 euros al mes y la persona que no recibe la ayuda, 200. Esto supone un gasto extra de 1.600 de euros al año, casi lo equivalente a una mensualidad. Las diferencias son mayores en regiones como Andalucía, donde, según la asociación, la prestación tarda más de 700 días.
«Esta duplicidad en el IVA penaliza a las personas dependientes», lamenta Pascual. Su sector no entiende que los servicios sociales se hayan quedado fuera de las medidas de la nueva directiva europea que da facilidades a los países para flexibilizar los tipos reducidos del IVA, o reducirlos al 0%. En opinión de Pascual, el propio comisario de Economía, Paolo Gentiloni, ha pedido coherencia con las prioridades europeas, entre las que se encuentra la protección de la Sanidad Pública. «Por eso CEAPs defiende esta medida, que tiene en cuenta a las personas más vulnerables».
Impuesto superreducido en Europa
En la mayoría de los países europeos, el impuesto que grava estos servicios son superreducidos, reconoce la asociación. Y en algunos casos, el beneficiario incluso está exonerado de pagar impuestos al respecto. CEAPs denuncia la falta de voluntad para eliminar la duplicidad y bajar el IVA de estos «servicios esenciales». Así lo constataron en la reunión que mantuvieron el lunes en Bruselas con dirigentes comunitarios. «Las negociaciones comenzaron en 2018, cuando ya firmamos el primer manifiesto en contra del doble IVA y no entendemos que ahora no se apruebe con la importancia que tienen estos servicios», manifiesta Pascual.
«No cejaremos en nuestra lucha contra esta discriminación histórica. No es fiscalidad, es justicia social», sostiene la presidenta de CEAPs, para quien es «ilógico que un mismo servicio, en un mismo lugar y a una misma persona tenga una tributación diferente». Apela a la altura de miras de los políticos y reclama que se pongan del lado de las personas mayores, de los dependientes y de sus familiares. Pascual ha aprovechado para dar las gracias a PP, ERC y PdCAT por presentar una enmienda a los Presupuestos Generales del Estado que pretendía acabar con las diferencias de IVA, a pesar de que no fue aceptada a trámite.