El pacto militar entre Sánchez y Erdogan complica la candidatura española a UNIFIL
El acuerdo ha generado recelos en otros países de la región, aunque España confía en un anuncio del secretario general de la ONU durante su visita al Líbano
Pedro Sánchez y Recep Tayyip Erdogan | Presidential Press Office/Handout via REUTERS
La candidatura de un general español para dirigir la misión de la ONU en el Líbano (UNIFIL) durante los próximos dos años ha entrado en su fase decisiva con la visita del secretario general de Naciones Unidas a este país de Oriente Próximo desde este domingo hasta el próximo miércoles. El Gobierno confía en que Antonio Guterres se decante por el general Aroldo Lázaro Sáenz para liderar el contingente de cascos azules, pese a que varios países de la región han mostrado reservas en las últimas semanas por el pacto militar entre Pedro Sánchez y el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, según confiesan fuentes diplomáticas a THE OBJECTIVE.
El proceso de selección de candidatos al puesto de comandante de UNIFIL se celebró a mediados de noviembre por vía telemática y coincidió con la cumbre de España y Turquía, de la que salió el anuncio por parte de Erdogan de que el país otomano quiere fabricar un nuevo portaaviones así como un submarino en colaboración la empresa española Navantia, que ya está ayudando en la construcción de un portaaviones más pequeño en los astilleros turcos.
Este hecho provocó un enorme malestar en la vecina Grecia y que el ministro de Exteriores heleno, Nikos Dendias, llamase por teléfono a su homólogo español, José Manuel Albares, para hacerle partícipe de la preocupación en Atenas por este pacto militar. Grecia y Turquía mantienen desde hace décadas una fuerte rivalidad por el control de las islas del Egeo, mientras que la isla de Chipre está dividida en dos zonas -la grecochipriota y la turcochipriota- desde hace casi 50 años. Precisamente, el jefe de la diplomacia española estuvo la semana pasada en Atenas y Nicosia para tranquilizar a ambos socios de la UE.
En la ONU, hubo otros países de la región que mostraron su sorpresa por el acuerdo militar entre Sánchez y Erdogan, lo que provocó preocupación en Madrid por las consecuencias que podría tener en la candidatura de Lázaro Sáenz. El hecho de que hayan pasado varias semanas desde las entrevistas a los candidatos aumentó esta percepción, pero el Ejecutivo confía ahora en que Guterres se decida finalmente por el general español.
El Gobierno llevaba desde principios de año queriendo presentar oficialmente la candidatura del general Aroldo Lázaro Sáenz para liderar el contingente de cascos azules. España cuenta en la actualidad con 830 militares en este país de Oriente Próximo, incluidos una docena de guardias civiles. Es la misión más numerosa en el extranjero y podría aumentar en otro medio centenar si se materializa el nombramiento del general Lázaro Sáenz, pues la presencia militar española sería mayor en el cuartel general de UNIFIL.
España quiere apostar fuerte en los pasillos de Naciones Unidas con esta candidatura para así romper la dinámica de fiascos internacionales de los dos últimos años, el último precisamente en la ONU, según desveló THE OBJECTIVE. Previamente, Nadia Calviño no pudo dirigir el Eurogrupo por un voto; Arancha González Laya aspiraba a la Organización Mundial del Comercio (OMC) aunque al final no se presentó su candidatura; Pedro Duque quedó fuera de la Agencia Espacial Europea y la ciudad de León sufrió una humillante derrota en la UE en la carrera por albergar el Centro Europeo de Ciberseguridad.
Un italiano al frente de UNIFIL
Nuestro país ha intentado en los últimos años volver a dirigir la misión de cascos azules en el Líbano desde que el general Alberto Asarta, quien en la actualidad es diputado nacional de Vox, estuvo al frente de UNIFIL entre 2012 y 2014. Desde entonces, ha habido tres comandantes italianos y un irlandés, lo que da una idea de lo importante y estratégico que es dicho puesto para Roma.
El mandato del general italiano Stefano Del Col estaba previsto que concluyese en verano del año pasado, así que urge su renovación. En esta ocasión, Roma no ha presentado candidato, así que Lázaro Sáenz solo tiene como rival de cierta entidad a un colega irlandés. Precisamente, el Estado Mayor de la Defensa destacó el pasado viernes en las redes el nuevo despliegue del personal del Mando de Canarias del Ejército de Tierra en tierras libanesas.
Las Fuerzas Armadas españolas se desplegaron por primera vez en el Líbano en septiembre de 2006. El grueso del contingente en la operación ‘Libre Hidalgo’ se encuentra en la base ‘Miguel de Cervantes’, cerca de la localidad de Marjayún donde está el cuartel general del sector Este, liderado por España. También hay tropas españolas en el cuartel general de la misión en Naqoura, el mando al que aspira este general del Ejército de Tierra.
Los militares españoles realizan patrullas a pie y en vehículo, para vigilar permanentemente la línea que separación entre Líbano e Israel. También establecen observatorios y realizan otras actividades en colaboración con las Fuerzas Armadas Libanesas (LAF). Todas ellas están dirigidas a garantizar el cumplimiento de la resolución 1.701 de Naciones Unidas y evitar que se llegue a situaciones que puedan conducir a una escalada de tensión entre las partes.
El contingente español llegó a contar con un máximo de 1.100 militares durante la etapa de Asarta. Desde el inicio de la misión hace una década y media, han fallecido quince cascos azules españoles en este país. El general Lázaro Sáenz conoce muy bien UNIFIL pues ha estado en tres ocasiones destinado allí, donde ha mandado la brigada multinacional en el sector que dirige España. En la actualidad, es el director de asistencia al personal en el Ejército de Tierra y se ha estado preparando en los últimos meses para el examen de candidatos en Nueva York.
