Alberto Garzón reprocha al PSOE su «interés partidista» en la polémica por la ganadería
«Yo estoy en contra de las macrogranjas, pero mis declaraciones fueron como ministro», dice el líder de IU
Alberto Garzón. | A. Pérez (EP)
Nuevo capítulo en la polémica por las declaraciones del ministro de Consumo, Alberto Garzón, sobre la ganadería intensiva en una entrevista con el diario británico The Guardian. El líder de Izquierda Unida ha reprochado, en una entrevista en Cadena SER, que el PSOE se moviera por intereses partidistas en el tratamiento de este asunto.
«Tenemos un bulo, una empresa vinculada al lobby de las grandes empresas cárnicas, manipulando la infomación de The Guardian para tratar de deteriorar la imagen del adversario. Eso se hizo una bola». Eso sí, se contradijo más adelante al atribuir el supuesto «bulo malintencionado» no a una empresa, sino a «la derecha», para posteriormente decir que ese hecho «ha sido aprovechado por otros actores».
«En el Gobierno todos buscaron los intereses partidistas por encima de la veracidad», ha dicho. A su juicio todo se reduce a una noticia falsa. «Tenemos un bulo, una empresa vinculada al lobby de las grandes empresas cárnicas manipulando la información de The Guardian para tratar de deteriorar la imagen del adversario. Eso se hizo una bola», ha lamentado Garzón.
«El modelo de producción es insostenible»
Preguntado sobre su postura sobre la industria ganadera, ha dicho: «Tenemos que extender la ganadería extensiva, familiar». «Estamos muy contentos con la línea de trabajo que estamos desarrollando [en este aspecto], alineada con las estrategias europeas y de hacer sostenible un modelo de producción y consumo que es conocido por todo el mundo que es insostenible. El impacto de las macrogranjas se tiene que abordar desde las políticas públicas», ha zanjado.
«El tema de las macrogranjas y la ganadería intensiva preocupa a la Comisión Europea», ha dicho. No tiene el «temor» que sus comentarios puedan haber generado una imagen negativa del producto español «porque todos los países se encuentran en la misma situación: todos los compradores saben que no es lo mismo la ganadería en extensivo que el modelo de macrogranja».
Defiende que sus comentarios fueron pertinentes en un foro extranjero como es una entrevista con The Guardian porque «los Gobiernos no tienen que esconder las problemáticas. Yo creo en la política valiente».
También ha aclarado otro interrogante que lleva circulando desde que saltó la polémica: ¿sus declaraciones fueron a título personal o institucional? «Yo estoy en contra de las macrogranjas como muchas personas, pero mis declaraciones fueron como ministro de Consumo», ha dicho. «Eso no significa que no haya un Gobierno de coalición y que no haya diferentes actores con distintos intereses».
También ha tenido críticas para quienes le han dirigido dardos en los últimos días. «Hay un elemento significativo: han salido presidentes de comunidades autónomas a criticarme a pesar de que en esas comunidades autónomas están haciendo normas muy buenas en este sentido, como Castilla-La Mancha, que están poniendo coto a la ganadería intensiva. Esto solo se puede entender por interés partidista».
