Podemos vulnera el pacto de Gobierno al intentar influir en la política exterior por el ataque de Rusia

Podemos rompe el pacto que selló con Pedro Sánchez durante la investidura del gobierno rojo-morado al intentar interferir públicamente en la postura internacional de España. Las declaraciones de ministros y portavoces morados para exigir al presidente del Gobierno que no envíe tropas o ayudas militares a Ucrania, entrando así en conflicto con las directrices de la OTAN que observa con preocupación las maniobras de Rusia, representa un nivel inédito de tensión en el Ejecutivo. Fuentes gubernamentales recuerdan que Podemos se comprometió a dejar en manos del PSOE los ministerios de Estado, entre los cuales se encuentro el de Exteriores, ahora dirigido por José Manuel Albares.

La crisis en Ucrania ha servido a Podemos para volver a cargar contra el Ejecutivo. Fuentes de Podemos revelan a THE OBJECTIVE que la cúpula de la formación llevaba días reflexionando sobre qué hacer ante la escalada de tensión en Europa oriental. Pablo Iglesias fue uno de los primeros que esbozó cuál iba a ser la posición de su partido: enfrentamiento directo a la OTAN si decide desplegar tropas para frenar una ofensiva de Vladimir Putin.

Aunque los morados se ubican oficialmente en algo parecido a la equidistancia y apelan a la paz y la negociación, de facto evitan condenar a Putin y Rusia y buscan una pacificación que puede traducirse en evitar poner sanciones y tolerar las maniobras militares del Kremlin. Y a pesar de que Iglesias y otros referentes de Podemos iban avisando en los últimos días que en su opinión no es conveniente enfrentarse a Rusia (sostienen que sería contraproducente por el precio del gas), el pasado viernes intervinieron directamente ministros como Irene Montero y el portavoz parlamentario Pablo Echenique.

«Creo que España es con rotundidad el país del no a la guerra, y que la sociedad vasca, la española y la catalana somos gente de paz, por tanto apostamos por la paz y la desescalada del conflicto, por evitar maniobras militares en la zona, por el diálogo y la diplomacia», afirmó Montero. Echenique se limitó a lanzar un mensaje: «No a la guerra». La ministra Ione Belarra también escribió: «Nuestro país ha dicho alto y claro siempre: no a la guerra. Con ese espíritu y con ese compromiso debemos trabajar e intensificar las vías diplomáticas para desescalar cualquier conflicto».

Ataque directo a Sánchez

Iglesias sostuvo el jueves que Sánchez sería «torpe» si decide sumarse a los países como Reino Unido y Estados Unidos que plantean una respuesta militar en el caso de una ofensiva rusa. Los morados se sienten más cercanos a Alemania y Francia, que apuestan por una respuesta más flexible, aunque tampoco descartan activar sus aviones y barcos militares. El gobierno, por otro lado, ha decidido enviar una fragata a la zona de apoyo a la misión de la OTAN y cazabombarderos al Mar Negro. Algo que para los morados es un «error».

Contrariamente a lo que ocurrió en otras crisis de Gobierno, los morados han empezado a centrar sus ataques en el propio Sánchez. Hasta ahora, Podemos mantenía al presidente al margen de sus críticas, y se dirigían contra ministros como Margarita Robles y Albares. Además, a diferencia de otras situaciones delicadas como la crisis diplomática con Marruecos, Podemos ha apostado esta vez por hacer públicas sus discrepancias con el Gobierno.

Cuando Sánchez intervino para intentar frenar la crisis con Marruecos, los morados eligieron mantener un perfil bajo, conscientes de que aquella situación podía peligrar la estabilidad del Ejecutivo. Ahora, sin embargo, han lanzado un torpedo directo a Sánchez incumpliendo lo pactado a finales de 2019, cuando se selló el pacto de coalición.

Debilitar a Yolanda Díaz

De hecho, fuentes gubernamentales admiten el malestar de los socialistas ante la ofensiva de Podemos. El propio ministro Albares reivindicó que la política exterior la dirige su departamento y el equipo del presidente. «La acción exterior de España la marca el presidente del Gobierno, y la posición del Gobierno se marca todos los martes», afirmó en la mañana del viernes.

«Lo que se dirime en estos momento en Ucrania es la propia base de la construcción europea. Europa supone respeto a la soberanía y a la integridad territorial de todos los países y eso es lo que nosotros respaldamos», añadió Albares, y agregó: «El compromiso de España en el seno de la OTAN con la seguridad de Europa es total. Hace años que participamos en las misiones que refuerzan la seguridad en el flanco este de la OTAN».

Otras fuentes socialistas acusan a los morados de no entender que España tiene un compromiso diplomático y estratégico con la OTAN, y que su posición está condicionada al pacto atlántico. Otros ven en el ataque de Podemos una instrumentalización para debilitar a Sánchez y a la propia Yolanda Díaz, quien de momento mantiene el silencio sobre el asunto.

Además, Podemos vuelve a tejer una alianza estratégica con los nacionalistas aprovechando la cuestión bélica. Tal y como ha afirmado Montero, los morados creen que tanto el PNV como ERC y Bildu tendrán que asumir una posición crítica con una escalada del conflicto y el envío de aviones o tropas.

Los morados, además, creen que responder a Rusia a nivel militar sería como «dispararse en el pie». Mientras que Iglesias remató la posición de los suyos en un artículo de CTXT publicado el jueves en el que rechaza hablar de acercamiento de los morados a Rusia, pero tampoco cuestiona la ofensiva de Putin: «Defender la paz supone asumir que es lógico que Rusia no quiera bases estadounidenses cerca de sus fronteras. Eso no convierte a Rusia en una URSS promotora del antiimperialismo en el mundo, ni hace que Putin sea de izquierdas, como sueñan en su nostalgia masturbatoria diferentes tribus de roji-pardos. Rusia defiende su seguridad y sus áreas de influencia como todos pero no es el faro del proletariado», escribió.

El propio Iglesias amenazó el pasado jueves a Sánchez con que el envío de militares españoles a la región tendría un efecto en el bloque de investidura. Podemos vuelve al ataque y lo hace en una materia particularmente sensible, a tal punto que la prensa internacional ya se ha interesado por la crisis interna en el Ejecutivo a raíz de la cuestión rusa. La escalada de enfrentamiento interno del Consejo de Ministros es sin duda inédita.