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Colapso en la Guardia Civil: los agentes tienen 234.465 días pendientes de librar

El Instituto Armado tiene sin cubrir 10.000 plazas en todo el país, según las asociaciones de guardias civiles. Madrid es la región con mayor déficit

Colapso en la Guardia Civil: los agentes tienen 234.465 días pendientes de librar

María Gámez. | Europa Press

La Dirección General de la Guardia Civil debe 234.465 días de descanso a los agentes que prestan servicios operativos, según la estadística que ha facilitado el propio departamento dirigido por María Gámez a las distintas asociaciones profesionales de guardias civiles. Estos datos, a los que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, revelan que el Instituto Armado adeuda un total 139.309 días no disfrutados—la mayoría, casi un 60% del total— a 25.798 agentes por haber trabajado en el turno de noche o en días festivos. Seguidos de otras 52.970 jornadas pendientes por las horas extra y 42.186, por los festivos no disfrutados —a cada guardia le corresponden 14 al año—.

Este escenario da cuenta del déficit de plantilla que sufre el Cuerpo. Según publicó este periódico, el Instituto Armado tiene sin cubrir 10.000 plazas en todo el país, en base a los datos manejados por las organizaciones de guardias civiles. La Comunidad de Madrid (2.479) es la región que cuenta con mayor carencia de agentes, en concreto casi una cuarta parte de puestos libres. Le sigue Andalucía, con 1.265 plazas vacantes, y Cataluña y País Vasco, con 886 y 681, respectivamente.

Los datos sobre los cientos de miles de días que tienen pendientes de librar estos funcionarios han salido a la luz después de que las asociaciones profesionales forzasen el pasado lunes la celebración de un pleno extraordinario del Consejo de la Guardia Civil para tratar la jornada laboral de los agentes. Desde hace años, los funcionarios luchan por conseguir «una jornada laboral digna» para poder conciliar laboral y familiarmente, así como por el «derecho a un descanso efectivo».

Cinco meses para librar días

La directora de la Guardia Civil, María Gámez | Efe

En la reunión con los representantes de los agentes, la directora de la Guardia Civil, María Gámez, aseguró que todos los funcionarios podrían disfrutar de estos descansos antes del 31 de junio, por lo que queda poco más de cinco meses para que el plazo expire, según aseguran las fuentes consultadas. De no cumplirse, «seremos muy beligerantes con esta cuestión, utilizaremos todos los cauces reglamentarios dentro del Consejo y agotaremos los mecanismos jurídicos necesarios, sin descartar incluso los tribunales europeos. No pararemos hasta evitar este atropello», denuncia el portavoz de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), Pedro Carmona.

Los agentes, denuncia la AUGC, «no solo trabajan de media 150 horas más al año que el resto de policías, sino que abusan y ponen excusas para que los descansos producidos por la actual orden general de servicios, emitida el 23 de diciembre de 2014, no puedan ser disfrutados por los agentes». «Los guardias civiles seguimos pagando los platos rotos de la nefasta gestión que la Dirección General está llevando a cabo en materia de jornada laboral», critican.

Guardia Civil y Policía

Los funcionarios confían en que la directora del Instituto Armado cumpla su promesa, pero critican que se niegue a implantar en el Cuerpo una jornada similar a la instaurada en la Policía Nacional. Según denuncian distintas asociaciones profesionales, son los «únicos trabajadores de cualquier cuerpo policial, o incluso servicio de emergencias, que no dispone de turnos con cadencias fijas».

Los guardias civiles reclaman el mismo turno de trabajo que existe en el Cuerpo Nacional de Policía, donde está instaurado el 6×6. Así, los agentes trabajan durante seis días, en dos turnos de mañana, tarde y noche consecutivos, y libran los seis siguientes. «No tienen dobletes, ni dobletes camuflados como nosotros. Los guardias civiles quedan como policías de segunda, sin turnicidad, trabajando más horas y percibiendo más salario», censura la Asociación Unificada de Guardias Civiles.

Por este motivo, y ante la inacción por el momento de la Dirección General, seis de las siete asociaciones representativas en la Guardia Civil -ASESGC, Jucil, AUGC, Asociación Profesional de Cabos, AEGC e Independientes de la Guardia Civil- se han unido en un «frente común» para presionar y luchar por la consecución de una «jornada laboral digna».

Para paliar al menos la sangría de agentes, el Ministerio del Interior ultima una fórmula con la que poder pagar pluses a plantillas de Policía Nacional y Guardia Civil en destinos como País Vasco, Cataluña, Baleares o el Campo de Gibraltar, según señalaron fuentes del departamento dirigido por Fernando Grande-Marlaska a THE OBJECTIVE. Zonas en las que existe un déficit de agentes desde hace años, bien por conflictos políticos o sociales, como es el caso de la comunidad autónoma catalana, o bien por el riesgo que conlleva el trabajo de los agentes, como ocurre en Cádiz en la lucha contra el narcotráfico.

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