Escisión en el principal sindicato de la Policía por diferencias con la equiparación salarial
Natan Espinosa, fundador de Jusapol, ha creado junto a otros cinco agentes un sindicato que retomará la lucha por la equiparación salarial
Mossos d'Esquadra, en una imagen de archivo. | Efe
La pugna por el control que se vive desde hace meses en el principal sindicato de la Policía, Justicia Policial (Jupol), ha culminado con la creación de una nueva organización. Siete antiguos afiliados se han unido para dar nombre al que será, aseguran, en sustitución de Jupol, el sindicato que luche —de nuevo— por «la equiparación salarial real» de los policías y guardias civiles con los cuerpos autonómicos. «Nuestro objetivo se basa en llegar a todas las comisarías y que todo policía sepa que somos la opción del cambio. Lo que tenía que haber hecho Jupol lo vamos a hacer nosotros».
El entrecomillado pertenece a Natan Espinosa, el policía del que surgió Jusapol, la plataforma que en 2017 sacó a las calles a miles de agentes para reclamar la equiparación con los Mossos d’Esquadra y que ahora, junto a otros cinco compañeros, ha creado Equiparación YA (EYA). Un nueva organización policial que aspira a arrebatar al sindicato mayoritario su posición en las próximas elecciones al Consejo de la Policía Nacional, en 2023, ante su inacción en la causa por la igualdad salarial entre todos los agentes.
EYA quiere hacerse con cinco asientos en esta institución, el órgano negociador entre los agentes entre los agentes y el Ministerio del Interior, para tener una mayoría suficiente con la que plantear «el conflicto colectivo cada dos meses» y que, de esta manera, no caiga nunca en el olvido. Conseguir esta equiparación es el único objetivo de este sindicato. Cuando lo consigan, explica Espinosa en conversación telefónica con THE OBJECTIVE, «se irán, si es que las bases no dicen lo contrario». No pretenden ser un «sindicato al uso». Ni promocionarán «cursos o descuentos de fin de semana», ni tampoco «regalarán bolis o libretas» para atraer a afiliados. Solo reclaman una cosa: el voto en las próximas elecciones.
«Queremos dar un paso al frente, ser la herramienta que Jusapol nunca tuvo», sostiene el fundador de EYA, en conversación telefónica con THE OBJECTIVE. «Jupol era el que debía haber perpetrado esta lucha. Cuando ganó las elecciones, tenía un programa y un código electoral claro: no caer en los errores de los sindicatos y conseguir la igualdad en los salarios con los Mossos. Dos años y medio después, sigue sin pedir el único objetivo por el que se se constituyó y está a mil cosas como el resto de sindicatos», sostiene.
Batalla judicial
La creación de esta organización es el último capítulo de una batalla interna en el sindicato mayoritario de la Policía, que acabado llegando a los tribunales. El primer episodio llegó en junio del pasado año, cuando el secretario general, José María García, fue destituido tras ser acusado por otros miembros de la dirección por abusar de su poder y cargar incluso gastos personas a las cuentas del sindicato.
Poco después, la crisis parecía haberse cerrado con el nombramiento de Aaron Rivero, actual secretario general de Jupol, y uno de los que había presionado para echar a su predecesor. No era así. La disputa volvía a surgir por parte de seis afiliados, entre ellos, Natan Espinosa, cuyas candidaturas para dirigir el sindicato habían sido rechazadas por no cumplir los requisitos fijados por los estatutos. Las discrepancias internas en la organización llegaban a los juzgados. Los seis implicados impugnaron ante la Justicia la elección de Rivero, pero la Audiencia Nacional avaló el proceso electoral.
Espinosa y los otros afiliados recurrieron al Tribunal Supremo, pero ante la previsión de que su veredicto saliese tiempo después de las elecciones sindicales, el fundador de Jusapol decidió dar el paso definitivo:empezar desde cero registrando Equiparación Ya. Dentro de dos meses esperan estar trabajando a pleno rendimiento, una vez que la Abogacía del Estado de el visto bueno a los estatutos del sindicato. Por ahora, cuenta el fundador, las sensaciones son buenas. «En tan solo 17 días, ya tenemos colaboradores en decenas de provincias y comisarías de todo el país. Hay mucho descontento contra Jupol y Jucil (la otra asociación que se creo por la lucha salarial de los guardias civiles), han dejado claro que no hay sitio para pedir la equiparación».
Jubilaciones
El acuerdo que policías y guardias civiles firmaron en 2018 con el Ministerio del Interior, dirigido entonces por Juan Ignacio Zoido, para igualar sus salarios con los de los mossos, no contemplaba la equiparación en los casos de segunda actividad y reserva, ni tampoco en las jubilaciones. Razón por la que Espinosa y sus compañeros pretenden conseguirla también en estos términos. «Si un policía o un guardia civil se jubila cobra 700 euros menos que cualquier agente en España», critica.
Según se desgrana de las tablas salariales de ambos cuerpos, cuando un policía catalán se retira anticipadamente, cobra un total de 2.659,41 euros brutos. Si lo hace un policía o un guardia, su pensión base de 1.577,81 euros, a lo que se añaden los trienios acumulados de los agentes, que pueden oscilar entre 200 y 300 euros, sin tener en cuenta impuestos.
En cualquier caso, el traslado de un agente a la Segunda Actividad le supone dejar de cobrar unos 700 euros al mes. Una situación que no se ve resuelta cuando el guardia civil o el policía cumplen los 65 años. Cuando alcanzan la edad suficiente para jubilarse, la pensión de un policía de escala básica asciende hasta los 1.821,29 euros. Mientras que la del mosso d’esquadra se mantiene igual. Ahora, los agentes catalanes y vascos, según lo que pactó el Gobierno con ERC y EH Bildu, podrán jubilarse a los 60 años cobrando el 100% de la pensión.
