Mañueco ofrecerá a Vox gestionar las consejerías de Cultura, Empleo y Agricultura
El plan inicial del PP era ceder Fomento a los de Santiago Abascal, pero la formación verde quiere la cartera que gestiona el campo
Juan García-Gallardo (Vox) y Alfonso Fernández Mañueco (PP) muestran el acuerdo de gobierno. | EP
Todavía no se ha empezado a negociar formalmente pero Alfonso Fernández Mañueco tiene ya su esquema gubernamental en la cabeza. Según adelantan fuentes populares a THE OBJECTIVE, la oferta que el próximo presidente de la Junta hará a sus nuevos socios de gobierno de Vox pasará por las siguientes consejerías: Agricultura, Empleo y una que englobaría Cultura, Turismo y Deportes. Las tres se añadirían a la vicepresidencia que ya tiene asignada Juan García-Gallardo.
El plan inicial del PP pasaba por incluir Fomento en la ecuación en lugar de Agricultura, pero la información que le llega a los populares es que los de Santiago Abascal tienen «especial interés» en hacerse con la cartera que gestiona el campo, tras su campaña centrada en la ganadería y la agricultura. «Les gusta mucho el tema rural», señalan recordando las buenas relaciones de Vox con la Asociación de Jóvenes Agricultores (ASAJA). La otra ‘obsesión’ de Vox es el departamento trasversal de Cultura, Turismo y Deportes.
Una exigencia que encajaría en los planes de Mañueco, cuyo entorno está sorprendido porque Vox acepte carteras de menor relevancia política y presupuesto. En este sentido, recuerdan que el precedente del gobierno de coalición con Ciudadanos contaba con tres carteras de mayor repercusión: Sanidad, Empleo y Cultura.
Sólo la consejería de Sanidad que dirigió la naranja Verónica Casado «contaba con un presupuesto de 1.000 millones de euros y más de 8000 funcionarios» a su cargo, explican las citadas fuentes, quienes celebran el perfil bajo por el que opta el partido de Santiago Abascal en el reparto de carteras.
Mañueco, sorprendido con García-Gallardo
Por ejemplo, en el equipo de Mañueco ha causado sorpresa que García-Gallardo no reclamase ninguna competencia autonómica para su vicepresidencia en la negociación. Intuyen que Abascal quiere «protegerle» en sus primeros pasos en política. Otras fuentes populares asemejan la situación al reparto de carteras sin funciones que se produjo con la entrada de Podemos en el Gobierno de coalición de Pedro Sánchez.
Así, destacan el hecho de que la portavocía del Gobierno regional vaya a recaer en el PP, en lugar de cederla al socio minoritario como ocurrió con el líder de Ciudadanos, Francisco Igea., en la pasada legislatura. «Lo que tiene sentido es que el portavoz dependa directamente del presidente, al igual que los delegados del gobierno», justifican fuentes de la Junta castellano-leonesa.
Génova también tuvo emisarios en la negociación. «Lo relevante es el programa», insisten sobre la estrategia de Mañueco. «La sorpresa favorable para nosotros es que iban cediendo en sus reclamaciones. Vox ha preferido sillas en vez de ideas», afirma a este diario un dirigente que siguió de cerca los contactos entre ambas formaciones.
En la dirección nacional del PP se tiene la certeza de que Vox «necesitaba decir que puede gobernar», de ahí que la formación de Abascal aceptase un programa de gobierno lleno de generalidades y sin rastro de sus polémicas iniciativas para derogar leyes autonómicas como las de la lucha contra la violencia de género o la memoria histórica. «No hay ninguna cosa estridente en el acuerdo. La generalidad es normalidad», subrayan las fuentes del PP.
