Alemania niega la entrada a la falangista Isabel Peralta por portar propaganda nazi
Según la legislación alemana, los objetos que portaba consigo la española constituyen un delito de apología del nazismo
Las autoridades alemanas impidieron este miércoles la entrada al país de Isabel Peralta, conocida figura de la escena de la neonazi en España. La Policía federal halló en su equipaje una bandera y un llavero con esvásticas nazis, un ejemplar de Mein Kampf, el libro que Adolf Hitler escribió en la cárcel en 1925, además de un libro de la serie de propaganda nazi Bund Deutscher Mädel. Según la legislación alemana, los objetos que portaba consigo la española constituyen un delito de apología del nazismo.
Las autoridades españolas habían advertido previamente a las alemanas del viaje de Isabel Peralta, de 19 años, que pretendía entrar en el país por el aeropuerto de Frankfurt. Presuntamente, la mujer iba a participar en varios eventos con la extrema derecha local. La Policía federal alemana la mandó directamente de vuelta a España.
Bastión Central e Isabel Peralta
Isabel Peralta se dio a conocer en 2021 por un vídeo en un acto de homenaje a la División Azul en el que profirió consignas antisemitas. Está vinculada, además, a la organización ultraderechista Bastión Frontal.
Esta organización ha estado bajo la lupa de las autoridades en diferentes ocasiones. En enero, agentes de la Policía Nacional detuvieron en Madrid a su actual líder, acusado de un presunto delito de lesiones, agravadas por alevosía, al propinar una brutal paliza a un miembro de esta misma organización en Valencia en el marco de unas jornadas celebradas por este emergente movimiento de carácter radical.
El pasado mes de noviembre, la Fiscalía de Madrid presentó una denuncia contra Bastión Frontal, concretamente contra la misma Isabel Peralta, por la presunta comisión de un delito de odio en relación a unas manifestaciones realizadas durante una concentración frente a la Embajada de Marruecos.
Ese día se concentraron unas 300 personas para cargar contra la «pasividad» del Gobierno central ante la crisis migratoria por provocar la entrada irregular de más de 8.000 marroquíes en Ceuta.
Durante la concentración, Peralta, en su condición de líder de Bastión Frontal, se colocó en la cabecera de la manifestación desde donde efectuó unas declaraciones ante las cámaras con la lectura de un manifiesto «con el que venía a apremiar a la violencia y hostilidad contra los migrantes marroquíes y musulmanes, relacionando inmigración y suplantación racial y cultural«.