El PNV lidera la rebelión contra Sánchez para precipitar su comparecencia
Fuentes parlamentarias relatan el asedio de los grupos al Gobierno en la Junta de Portavoces mientras Podemos «guardó silencio»
Ha sido la Junta de Portavoces más bronca de las que se recuerdan y un buen termómetro de las resquebrajadas relaciones del Gobierno y sus socios tras el bandazo de Pedro Sánchez con el Sáhara Occidental. El Ejecutivo socialista sufrió este martes el asedio de todos sus socios parlamentarios que le advirtieron de que «la legislatura se le escapa de las manos», aunque el salto cualitativo es que fue el socio preferente, el PNV, quien lideró la rebelión contra Pedro Sánchez.
Según relatan a THE OBJECTIVE fuentes parlamentarias, la intervención del PNV fue «dura, casi impertinente» en la Junta de Portavoces, donde solicitó un pleno monográfico del presidente del Gobierno «esta misma semana», antes de las explicaciones de su ministro de Exteriores, José Manuel Albares, en la comisión del ramo en el Congreso. En otras palabras, Aitor Esteban quería forzar a Sánchez a dar explicaciones este mismo miércoles, y no esperar una semana a que aprovechara su comparecencia tras el Consejo Europeo de este jueves y viernes, a lo cual le obliga el reglamento del Congreso.
Batet frena a Esteban
Según ha podido saber este periódico, Batet frenó a Esteban diciéndole que su petición no se había calificado por parte de la Mesa, ante lo cual el portavoz del PNV ha advertido que existe otra petición del PP solicitando la comparecencia del presidente del Gobierno que sí había sido calificada este martes. Batet se excusó nuevamente alegando que «para una modificación del orden del día se requiere unanimidad» de la Junta de Portavoces.
Esteban contraatacó: «¿Dónde lo dice?; Batet respondió apelando al reglamento. «¿Qué artículo del reglamento?», insistió nuevamente Esteban notablemente molesto porque se ignore al «80% de la cámara que pide que el presidente comparezca». Y añadió con una dureza inusual contra Batet: «Nada, pues que se aplique el rodillo. Para tí la mayor».
«Esteban ha canalizado el hartazgo de todos»
Según las citadas fuentes, la novedad de la bronca parlamentaria radica en que «Esteban, que tiene toda la razón, ha reflejado el hartazgo de todos los grupos parlamentarios con una tomadura de pelo. Somos el 80% de la camara. Hay que plantarse en algún momento». Y en esta ocasión el plante ha sido de todos contra uno, el Gobierno, y la omisión de su socio minoritario, Podemos.
«La realidad es que mucho estamos tardando en reaccionar», explican desde los grupos de la oposición ante las formas de un Gobierno que se supera en las faltas de respeto al Parlamento. «En el estado de alarma se declaró de 6 meses para no venir al Congreso. Muchos han perdido la paciencia y el tema de Marruecos es la gota que colmado el vaso», en un Congreso en el que este martes el Gobierno se aferró al reglamento para salvar al presidente de las explicaciones urgentes que respaldaron todos los grupos salvo Podemos.
El silencio de Podemos
Otra de las novedades de la reunión de la Junta es que se rompió con los dos bloques de la legislatura y se hizo la pinza entre PP, Ciudadanos, Vox y la alianza Frankenstein que apoya al Gobierno. «Todos, sin excepción, hemos apoyado la comparecencia urgente: PP, Cs, Vox, ERC, Más País, ERC, JuntsxCat, Bildu y los Mixtos…», ponen en valor desde la oposición.
Y etso ha ocurrido porque el PNV ha dejado de hacer de ‘salvavidas’ al Gobierno en una práctica parlamentaria que consistía en votar en contra de una petición de comparecencia del presidente Sánchez que el Ejecutivo cambiaba por otras de ministros a petición propia. «El PNV siempre ha pasado por ello. Cuando el Gobierno se veía acorralado, hacía unas llamadas y el PNV apoyaba para hacer decaer las solicitudes de comparecencia pero esta vez ha dicho ‘Nos estáis tomando el pelo’».
Gómez: «decae la iniciativa»
En la reunión de la Junta, el PP tomó la palabra para recordar que la unanimidad no la recoge el reglamento del Congreso sino que se trata de «una tradición inveterada para proteger a las minorías de que las mayorías vulneren sus intereses». Pero paradójicamente, el PSOE se aferró a esta práctica parlamentaria para hacer valer los suyos propios. «No hay unanimidad, así que decae la iniciativa», proclamó el portavoz socialista, Héctor Gómez, facilitando el silencio de Podemos. El portavoz, Pablo Echenique, permaneció en silencio «mirando hacia abajo y evitando salir al rescate de su socio de coalición».
El silencio de Echenique se complementó con su prudencia en la rueda de prensa posterior a la reunión del organismo parlamentario. Preguntado por la necesidad de que compareciera de forma urgente y monográfica el presidente Sánchez, el portavoz morado rebajó el nivel de la crítica de los últimos días: «No hará falta tener una opinión al respecto porque lo va a hacer, el presidente va a comparecer la semana que viene».
Comparecencia el miércoles 30
El portavoz de Podemos fue el primero en confirmar la fecha de la comparecencia de Sánchez el miércoles 30 de marzo, al día siguiente del Consejo de Ministros del día 29 en el que se aprobará un paquete de medidas acorde a las decisiones del Consejo Europeo de finales de esta semana. Según los grupos de la oposición «Sánchez quiere diluir el tema del Sáhara entre las decisiones del Consejo, la cumbre de la OTAN de este jueves» y suavizar así la unanimidad de la oposición contra su acercamiento a Marruecos.
Según fuentes parlamentarias, el reglamento del Congreso obliga al presidente a rendir cuentas al Parlamento de los acuerdos del Consejo Europeo pero ni fija un plazo concreto para su comparecencia ni le exige informar sobre otras cuestiones de Política internacional, como el giro histórico del Gobierno socialista en torno al Sáhara. La ‘treta’ parlamentaria persigue anular la petición de comparecencia unánime y monográfica sobre el Sáhara que los grupos aprobarán el martes que viene en la Junta de Portavoces, un día ante de la comparecencia de Sánchez a modo de ‘totum revolutum’.
Una fórmula y una fecha que no confirmó Moncloa hasta el transcurso del Consejo de Ministros, una vez asumió que había que precipitar las explicaciones del jefe del Ejecutivo que, esta vez sí, se ha quedado sólo.